Según un estudio de opinión pública en Mendoza sobre 3800 casos, realizado por la consultora Analogías entre los días 26, 27 y 28 de agosto de cara al proceso electoral provincial arrojó que la oposición toma terreno de forma constante y creciente en esa provincia.
De hecho, Anabel Fernández Sagasti, candidata a gobernadora del peronismo recibe un 62% de aprobación en su imagen personal, logrando un 34% de ponderación “muy buena”, lo cual demuestra un núcleo duro mayor incluso a su imagen negativa acumulada.
Cabe destacar que un 8% no tiene definida una opinión de Sagasti, lo que podría ser terreno fértil para un crecimiento de su imagen positiva.
Al igual que Alberto Fernández, Sagasti logra una imagen positiva creciente a mayor edad y menor nivel educativo, ya que 3 de cada 4 personas que denuncian estudios básicos califican positivamente a la candidata.
Mientras tanto, el candidato presidencial del Frente Todos recibe una imagen positiva del 58%, mientras que un 39% lo califica negativamente. Es remarcable que la opción “muy buena” representa un 38% de las respuestas, lo cual representa un gran núcleo duro de acompañamiento.
En la vereda de enfrente: el oficialismo
Al evaluar la aprobación del Gobierno de la Provincia, la gestión de Alfredo Cornejo, pese a estar ligada al oficialismo nacional, recibe un apoyo de la población que supera el 50%, con un diferencial positivo de 9,6 puntos. Esto implica que la gestión provincial tiene 11 puntos nominales más de aprobación que la nacional.
Al igual de lo que sucede con la gestión de Macri, la gestión de Alfredo Cornejo logra su rechazo más intenso entre los adultos entre 45 y 59 años y su mayor aprobación entre los mayores de 60.
Por su parte, la gestión del presidente Mauricio Macri tiene una aprobación del 39%. Mientras tanto, el 53% la desaprueba.
“La gestión nacional encuentra un rechazo claro en todos los vectores etarios salvo en el grupo de aquellos que tienen mas de 60 años, siendo esto una constante de la evaluación del oficialismo. Asimismo, a diferencia de lo que ocurre en otros distritos, la mayor intensidad del rechazo se encuentra en el grupo etario 45/59 años”, explica el informe.
Por otro lado, al medir la imagen personal del Presidente permitiendo opciones de calificación intermedias, Mauricio Macri consigue un diferencial positivo de 4,1 puntos, apoyado en un segmento importante (17,7%) que califica su figura con la opción de aprobación más débil (“regular positiva”). La opción más elegida para calificar la imagen personal de Macri es “Muy mala” con un 26% de las respuestas.
La valoración del Presidente es mayor entre los adultos mayores de 60 años dónde logra un diferencial positivo mayor a los 10 puntos. Fuera del dato mencionado, la imagen personal del Macri presenta universos similares entre aquellos que lo valoran positivamente y los que lo rechazan.