El Gobierno oficializó 200 despidos en la empresa estatal de agua Aysa, la compañía de servicios que estuvo a cargo de Malena Galmarini durante el gobierno de Alberto Fernández. Cien telegramas fueron enviados el 4 de marzo y la misma cifra este 5. En tanto, hay alertas sindicales por un eventual plan de recortes en otros mil trabajadores.
AySA, hasta la semana pasada, tenía en su conducción a Marcelo Papandrea, un ejecutivo con terminal política en la esposa del exministro de Economía Sergio Massa y que quedó al frente en el comienzo de la gestión de Javier Milei, hasta que renunció. La empresa quedó virtualmente intervenida por la Jefatura de Gabinete, que comanda Nicolás Posse.
Desde la empresa aseguraron que los 200 despidos ya efectivizados corresponden a personal sumariado, con asistencias injustificadas o que eran puestos políticos que respondían a Galmarini.
Desde el sindicato de Obras Sanitarias, cuyo titular es José Luis Lingeri -con injerencia en el directorio de AySA- confirmaron la salida de los 20 cargos políticos, pero no así lo de los trabajadores con irregularidades, que habría detectado la nueva gestión.
En lo interno, habrá una asamblea del Cuerpo de Delegados de la empresa. Allí discutirán los trabajadores las medidas a tomar y el posicionamiento colectivo.
Audiencia pública para subir tarifas
El Gobierno nacional convocó a una audiencia pública para definir un aumento en el precio del agua del 206 por ciento. Lo hizo a través de la Resolución 2/2024 publicada este martes en el Boletín Oficial y será el 27 de marzo a las 10.
La modalidad será “mediante una plataforma digital y su desarrollo se transmitirá en simultáneo a través de una plataforma de streaming”, informa la Resolución.
La administración de Milei buscará imponer durante la audiencia que se establezca una nueva modificación en el sistema de medición del consumo de agua para que los edificios con medidores globales se cobre a usuarios de forma individual, a través del viejo sistema de medición por metro cuadrado.