Declararon hoy en la Legislatura porteña al lenguaje de señas como lengua y medio de comunicación oficial para las personas con discapacidad auditiva en todo el ámbito de la Capital Federal. Esto significa que desde ahora a las personas sordas se les podrá enseñar mediante el uso de este lenguaje en las escuelas "de educación especial" que tiene la Ciudad, cosa que hasta hoy no era posible, justamente por no ser el de las señas, una enseñanza oficial.
Con un cerrado aplauso y por unanimidad fue sancionada en el recinto la ley, cuya autoría pertenece al diputado justicialista Eduardo Valdés. En las tribunas populares del lugar se encontraban presentes gran cantidad de personas sordas, quienes seguían atentamente el tratamiento parlamentario que se le daba al despacho ya que todo lo que acontecía les era traducido a través de señas por la intérprete Mabel Remond, una integrante de la Asociación de Sordomudos de Ayuda Mutua (ASAM), quien también asesoró en la elaboración del proyecto.
El proyecto de Valdés propone, además del reconocimiento oficial del lenguaje, que se incorpore cierto número de materias al plan de estudios del profesorado especializado en discapacitados de audición, voz y lenguaje de la Ciudad.
En la Capital federal viven unas 300 mil personas sordas. Para educarlos, la Ciudad cuenta actualmente con tan sólo siete escuelas primarias y tres secundarias que son denominadas "de educación especial". En ellas no se educa por señas por el simple motivo de que no era un lenguaje oficial, sino que se les enseña a los sordos a emitir un lenguaje articulado, es decir a hablar, para luego incorporar otros conocimientos. Por eso, para aprender por señas los sordos tenían que dirigirse a las mas de 40 instituciones que la comunidad sorda tiene en Argentina.
"Una persona sorda, desde su nacimiento, se comunica naturalmente por señas, por lo tanto se reclama el derecho de una minoría a comunicarse en su lengua natural", argumentó en su proyecto Eduardo Valdés.
"La aplicación de las señas como método oficial de enseñanza permitirá que los sordos aprendan mucho mejor y mas fácilmente no solo el idioma castellano, sino todos los conocimientos básicos de cualquier alumno", agregó el diputado, al tiempo que reconoció: "Oficializar este lenguaje implicaría otorgarle un status de igualdad frente a cualquier otro idioma".