La justicia civil dispuso que el Teatro Colón, o sea la ciudad de Buenos Aires, deberá abonar a Alejandro Parente, un bailarín del teatro, más de 27000 pesos en compensación por haberle pagado salarios inferiores a los que le correspondían por su labor profesional.
El pronunciamiento de la cámara resulta confirmatorio del de primera instancia.
El reclamo del bailarín se refería a que no obstante su labor profesional, que en reiteradas oportunidades había consistido en el desempeñado como bailarín solista o primer bailarín, recibía una remuneración menor -ya que en la nómina municipal se encontraba en la categoría de bailarín de fila- y pidió que se le liquiden sus haberes en función de la labor específicamente cumplida, a lo que hizo lugar la justicia civil.
Este es el primer pronunciamiento de la justicia, pero existen más de 15 reclamaciones similares de otros bailarines en trámite.