La Asociación Médicos en Catástrofes decidió conformar una red de médicos que recorrerán en trailers la Ciudad de Buenos Aires y el Gran Buenos Aires brindando atención médica a personas carenciadas.
"A pesar de los anuncios oficiales, la situación sanitaria de los sectores más vulnerables se agrava día a día", dijo la entidad, al tiempo que aseguró que "miles de niños y madres quedan afuera del sistema formal de salud que se encuentra en estado de colapso no declarado".
Por este motivo, la ONG argentina lanzó una convocatoria urgente a médicos clínicos, pediatras, obstetras y odontólogos que puedan donar su tiempo para realizar guardias solidarias.
"El objetivo es ayudar a todos aquellos que no pueden acceder a un control de salud, a veces por mero el gasto que ocasiona tener que viajar hasta el hospital", explicó Agustín Reed, director general de MEC Argentina, que trabaja bajo la coordinación de las Naciones Unidas.
Los trailers, que ya comenzaron a recorrer la ciudad y el conurbano, fueron equipados con equipos tecnológicos para cada especialidad, entre los que se encuentran una sección de heladeras que permiten la conservación de vacunas y medicamentos.
Según el servicio de noticias Infocívica.org, las guardias médicas recorren un circuito previamente diagramado y regresan al lugar para brindar un seguimiento adecuado al paciente, sin las largas esperas tan comunes en los hospitales.
Desde 1996, la organización no gubernamental realiza una vez al año un relevamiento sanitario de niños, adolescentes y embarazadas de distintas provincias del país, con resultados satisfactorios. En Abra del Sauce (Salta) se alcanzó una mejoría en los controles de salud, alimentación y lactancia materna. Además, se realizaron talleres para embarazadas especialmente ideados para adolescentes. En Libertador San Martín (Jujuy) y Las Lomitas (Formosa) se produjo un importante intercambio con la sociedad que permitió dejar capacidad médica instalada de manera permanente. También se asistió en Goya (Corrientes) a los damnificados por las inundaciones.
La ONG se conformó tras el genocidio de Ruanda, en el que un grupo de médicos argentinos -coordinados por Médicos Sin Fronteras y la ONU- instalaron un hospital de campaña para asistir a los heridos del conflicto, que dejó más de un millón de muertos.
Actualmente la organización dispone de 320 profesionales médicos argentinos que -coordinados por la Organización Mundial de la Salud y UNICEF- están en alerta constante para viajar a misiones de urgencia en cualquier lugar del mundo.
