El vicepresidente de la Legislatura de la Ciudad, Santiago De Estrada (Compromiso para el Cambio), aceptó el pedido del abogado del Movimiento Nacional de Empresas Recuperadas (MNER) y presidente del bloque Frente para la Victoria, Diego Kravetz, para que la Junta de Ética lo investigue ante la denuncia penal que hizo el dueño de una empresa concursada. NOTICIAS URBANAS reproduce la desgrabación integra de las declaraciones de Kravetz en la sesión parlamentaria de este jueves.
"Voy a plantear una cuestión de privilegio en los términos del artículo 89 inciso 2°, porque entiendo que se han mancillado mi nombre y mi honor con una denuncia penal, de la cual tomé conocimiento en el día de la fecha. Voy a pedir que la Junta investigue mi conducta para desprenderme de cualquier tipo de subjetividad y responsabilidad sobre mi nombre.
Existe una empresa que se llama Facya Sociedad Anónima, cuyo apoderado hace la denuncia, que en el año 1999 tenía 150 empleados quienes percibían un sueldo de aproximadamente 550 pesos. Hoy tiene 11 empleados, pero no paga contribuciones ni aportes previsionales desde el año 1998. Por estos conceptos, debe aproximadamente 250 mil pesos. Desde noviembre del año 2003, dicha empresa está pagando a los 11 empleados que quedan vales semanales de 20 pesos, y le debe a la ciudad aproximadamente 25 mil pesos. Se trata de una empresa que está en convocatoria -cuando se inició la convocatoria tenía aproximadamente 200 máquinas, pero hoy tiene 40-, y no tiene gestión comercial.
En ese contexto, me vinieron a ver los trabajadores, junto con un abogado. Por mi parte, acompañé al abogado y a los trabajadores a una audiencia en el Juzgado Comercial, audiencia de la cual surgió la intervención judicial de la firma. Los trabajadores se encontraban trabajando en la firma en legal forma. Actualmente, están retirando aproximadamente 550 pesos mensuales, que es lo que retiraban hace 5 años.
Independientemente de eso, hubo una denuncia penal que hizo la patronal, en la cual se me involucra con nombre y apellido como dirigiendo una toma que no existió y de la cual no participé. No voy a hablar sobre si estoy a favor o en contra de la toma, porque el pueblo sabe cuáles son las herramientas que tiene para luchar. Solamente voy a decir que en esta toma no participé.
En mi opinión, esta denuncia se enmarca en una campaña que proviene de algunos medios de prensa, en la cual se hace hincapié en algunas afirmaciones que no son ciertas, que me involucran en forma directa, de alguna manera tratando -me parece- de mermar mi actividad o mi militancia como abogado.
Soy abogado del Movimiento Nacional de Empresas Recuperadas, y no voy a dejar de serlo. Nosotros tenemos un diagnóstico de la realidad argentina, y es que hace 30 años se viene desindustrializando el país. Nosotros vamos a seguir peleando contra eso. Quiero decir que cada una de las empresas que hemos recuperado tiene un valor social, y todas trabajan en legal forma. Los trabajadores que pelean por esto se encuentran siempre en la disyuntiva entre estar incluidos o excluidos del sistema. Estar excluidos significa salir de la organización social del trabajo sobre el cual se organiza la sociedad, y por eso pelean con tanta fuerza. En estos casos, ha habido procesados -es cierto- y ha habido tres muertos -también es cierto-; pero cada una de las empresas trabaja en forma legal.
Repito: no voy a dejar de ser abogado de estas empresas. Si no soy abogado de esta empresa, es porque no tengo tiempo. Es mi forma de militar: otros militan de otra manera. A mí también en algún momento me tocó militar de otra manera -pegando afiches o panfleteando-, pero hoy me toca asumir el rol de abogado, y voy a seguir ejerciéndolo. Los trabajadores pueden elegir la forma que les parezca más conducente para sus fines, que a veces puede reñir un poco con el derecho. No va a ser mi caso, porque, repito, soy abogado.
Hubo otros abogados y políticos, como Alicia Pierini, Augusto Comte, Luis Zamora o Héctor Polino, que desde otra óptica -desde los derechos humanos o las cooperativas- ejercieron la profesión en defensa de sus ideales.
Me parece que hay una suerte de campaña para atacar una forma de recuperar empresas -que no digo que sea la única-, que tiene que ver con que la política no se meta en la economía. Obviamente, para nosotros la política en materia económica es fundamental, y entiendo que tratan de dividir a la Legislatura en este sentido. Creo que no van a poder lograrlo.
Esta no es la única forma de recuperar empleo; es una forma más. Lo importante es que cada uno mire cómo se hace para que la sociedad se pueda seguir integrando a partir del trabajo, y no a partir de la contención o de los planes sociales. En función de lo que he dicho, y de la denuncia que existe, solicito que mi manifestación pase a la Junta y se investigue de la forma correspondiente".
