Todavía no se habían apagado las brasas de la visita al país azteca de Néstor Kirchner, cuando el presidente mexicano Felipe Calderón recibió al alcalde electo, Mauricio Macri, en una visita que la suspicacia porteña relacionaba con negocios, pero no, o no solamente.
El encargado de despejar las dudas fue el propio empresario, quien contó el acuerdo alcanzado en el Distrito Federal: se trata de trabajar bajo el liderazgo del Partido Accional Nacional (PAN) en la Organización Demócrata Cristiana de América (ODCA) para fortalecer el estatuto institucional de los partidos de la derecha latinoamericana.
Invitado a México por Manuel Espino, presidente del PAN y líder de la ODCA, Macri también dijo que acordó con Calderón un intercambio de festejos por el bicentenario de las independencias de ambos países. Así las cosas, habrá una semana de celebraciones en la Capital Federal y otra en el DF.
La otra definición política importante es que el líder del Pro (como Kirchner y la candidata presidencial del justicialismo, Cristina Fernández), se mostró "muy a favor" de que México forme parte del Mercosur.
