La orden judicial que ordena la restitución del Hotel Bauen a la empresa Mercoteles S.A deberá efectuarse en los próximos días. La situación generó temor en los trabajadores de la cooperativa, quienes pretenden que el inmueble sea expropiado por el Gobierno. No obstante, desde la compañía aseguran que no habrá despidos.
El abogado de la empresa propietaria Mercoteles S.A, Gerardo Palomero, explicó en diálogo con Noticias Urbanas, que la restitución deberá realizarse en las próximas semanas. “Desde que la Justicia envió la notificación se debe cumplir un plazo de 30 días hábiles, que se cumpliría el 15 de mayo aproximadamente”, señaló. Según indicó, “ese día empezaría el proceso” para solicitarles a los integrantes de la cooperativa que dejen el lugar. Si no se logra, luego llamarían a la fuerza para proceder al desalojo. Al respecto señaló: “Queremos causar el menor daño social posible”.
Por otro lado, al referirse a los puestos laborales, aseguró que “la idea es respetar las fuentes de trabajo”. “Le ofrecimos a los cooperativistas trabajar en relación de dependencia. La idea es mejorar su condición laboral”, dijo. Además, agregó que “primero haría falta una suerte de habilitación. Es un edificio del año 1978. Se necesita hacer una fuerte inversión y estamos dispuestos a hacerla. El edificio cuenta con tres clausuras, cuando los cooperativistas toman el inmueble, ellos piden permiso para la explotación pero la Justicia no se lo concedió”.
Al ser consultado sobre los dichos de los cooperativistas, quienes sostienen que los integrantes de Mercoteles SA son los mismos, con otra firma, que aquellos que construyeron el hotel, es decir, el grupo creado por Marcelo Iurcovich, dijo: “A fines de 2012 se produce la compra del Bauen por parte de Mercotel. Los cooperativistas son anoticiados mediante un escrito. Se presentan ante el juzgado y aceptan el cambio de titularidad”.
Por otro lado se refirió a la posibilidad de que el Estado expropie el inmueble para cobrarse una antigua deuda con la empresa, que data del tiempo de la construcción del hotel, que fue levantado para el Mundial de 1978 con créditos del Banco Nacional de Desarrollo, integrante de la banca estatal. Al respecto señaló que “el valor del inmueble es de aproximadamente 25 millones de dólares, la deuda es de alrededor de 9 millones de pesos, es un número insignificante”. De este modo, consideró que existen pocas posibilidades de que se materialice el proyecto que tiene como fin que el edificio sea declarado de utilidad pública.