El reclamo de los trabajadores de Metrovías por el veto a la Ley 871, que restablecía la jornada laboral "bajo tierra" de seis horas, se endurecerá en la tarde de este jueves cuando los empleados de la empresa concesionaria del servicio se reúnan con asambleístas y militantes de partidos de izquierda, para hacerle un "escrache" al jefe de Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires, Aníbal Ibarra.
La protesta, que se realizará a las 19:30 frente al domicilio de Ibarra -Triunvirato y Avenida de los Incas-, es parte de un plan de lucha que se inició luego de que el líder del Frente Grande les negara la reducción de la carga horaria. Casi tan irritativo como este hecho fue, para los trabajadores de la empresa concesionaria, enterarse que, pocos días antes de vetar la norma, Ibarra había firmado el Decreto 1110, por el cual el Gobierno de la Ciudad autorizó Subterráneos de Buenos Aires a renegociar los contratos de obras públicas suscriptos con Benito Roggio e Hijos SA -dueña de Metrovías-, entre otras firmas.
Pese a que los legisladores porteños expresaron públicamente que insistirán con la norma vetada por el jefe de Gobierno, en la última reunión de la comisión parlamentaria que debe emitir despacho no hubo quórum. Por tal motivo, los delegados de los trabajadores del subte se dirigirán a la Legislatura de la Ciudad para reclamarles que en la cita del próximo lunes estén presentes para discutir el proyecto.
"Ibarra se merece este repudio", expresó la diputada Vilma Ripoll (Izquierda Unida), para luego agregar: "la pelea no terminó. Desde la Legislatura vamos a reafirmar la ley, para que los trabajadores recuperen un horario digno y los pasajeros tengan mayor seguridad."
INSEGURIDAD BAJO TIERRA
La ola de inseguridad también llegó a los subterráneos. En las últimas semanas se registraron numerosos asaltos a las cajas, por lo que los delegados gremiales reclamaron que se las blinde para proteger a los trabajadores que allí desarrollan sus tareas. "La empresa prefiere pagar el seguro, antes que proteger a sus empleados", expresó una fuente sindical. La misma sostuvo: "no pedimos más efectivos policiales o empleados de seguridad, porque en los robos en que estos últimos estuvieron presentes, el asalto se produjo con violencia y lo que queremos es proteger a nuestros compañeros".