El ministro de Seguridad porteño, Guillermo Montenegro, ratificó ante la Cámara Federal su pedido de que el juez federal y ex colega Norberto Oyarbide no siga en la causa por las escuchas telefónicas ilegales.
Montenegro, que junto a jefe de Gobierno, Mauricio Macri, y el ex ministro de educación de la Ciudad, Mariano Narodowsky, ya fueron llamados a prestar declaración indagatoria ratificó su reclamo en una audiencia "in voce" ante los jueces de la sala I.
El funcionario se ampara en el artículo 55, inciso octavo, del Código Penal Procesal de la Nación que establece la inhibición de un juez en un causa "si antes de comenzar el proceso hubiere sido acusador o denunciante de alguno de los interesados o acusado o denunciado por ellos".
Según consigna la agencia Télam, Montenegro adujo que cuando se desempeñaba como fiscal federal denunció a Oyarbide por haber intervenido los teléfonos del abogado Mariano Cúneo Libarona en la causa del prostíbulo masculino Spartacus.
Por la causa del espionaje telefónico organizado por el ya removido jefe de la policía metropolitana Jorge "Fino" Palacios, Oyarbide y el espía Ciro James, Oyarbide citó a declarar a Montenegro el próximo miércoles 21 y para el 26 al ex ministro de educación porteño Mariano Narodosky, quien contrató a James como asesor.
Ambos están sospechados de haber encubierto el sistema de escuchas mientras que Macri, reprogramado para el 5 de mayo ya que viajó a la India, está imputado de haber utilizado esa estructura para espiar a su propio cuñado, Néstor Lorenzo, uno de las victimas del caso denunciado por dirigente judio Sergio Burstein.
La sala I de la Cámara, que integran los jueces Jorge Ballestero, Eduardo Farah y Eduardo Freiler, tiene un plazo de 48 horas para resolver sobre la continuidad de Oyarbide en la causa a partir de que sea informado el tribunal, lapso que vencería el mismo día en que Montenegro debe concurrir a tribunales a declarar como sospechoso.