La Comisión Municipal de la Vivienda (CMV) deslindó su responsabilidad en el violento desalojo de más de 500 personas que este lunes intentaron ocupar un predio -propiedad de la Ciudad de Buenos Aires- en el partido de La Matanza, y que concluyó con varios heridos de consideración, entre mujeres y niños.
"No podemos legitimar la ocupación de tierras de la ciudad, pero tampoco daríamos la orden de reprimir para desalojar los terrenos", dijo a NOTICIAS URBANAS el titular de la CMV, Eduardo Jozami.
En un comunicado, la CMV aseguró que "recibió a vecinos-ocupantes del citado predio, a quienes se les señaló nuestra disposición a buscar alguna forma de acuerdo que incluyera al Muncipio (de La Matanza) y al Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires". Además, aseguró que "la medida de desalojo violento (…) no sólo no fue propiciada por la CMV, sino que ni siquiera nos fue notificada por el Juzgado, circunstancia más que llamativa".
Fuentes judiciales de la Provincia de Buenos Aires aseguraron que el desalojo se originó tras un escrito presentado por la Ciudad de Buenos Aires que buscaba ratificar su propiedad sobre los terrenos. Sin embargo, las mismas fuentes no pudieron informar sobre la libertad de acción que recibió la policía para cumplir con la orden de desalojo del Juez Ochipinti -del juzgado de garantías Nº3 de La Matanza.
NEGOCIANDO UNA SOLUCIÓN
Jozami afirmó que existe disposición del organismo que dirige para regularizar la situación de los terrenos en disputa. "Hace tiempo -dijo Jozami- le venimos planteando a Balestrini la posibilidad de llegar a un acuerdo para un proyecto de urbanización, pero la Ciudad no puede cargar con el costo de las obras".
Si bien existen varios proyectos, no todos contemplan la construcción de viviendas ya que una parte de las tierras -otorgadas en tiempo de Onganía y que fueron paulatinamente ocupadas en precarios asentamientos- fueron utilizadas durante décadas como un basural.
Por su parte, el secretario de gobierno de La Matanza, Alberto Suárez, afirmó anoche que recibió hace pocos días a unos 200 vecinos de barrios cercanos al predio en Ciudad Evita que dijeron que habían sido enviados por Tucci -el coordinador de la CMV en dicha localidad- para discutir acerca de su futuro barrio. "Nosotros -afirmó Suárez- creemos que quieren trasladar gente de la Capital a La Matanza y para ello están promocionando la concesión de tierras".
CUESTIONAN EL OPERATIVO
Como consecuencia del accionar policial, al menos cinco personas -entre los que había mujeres y niños- sufrieron heridas de consideración. Una mujer que habita el barrio 22 de Enero -lindante con el predio en disputa- recibió un balazo en su pierna que -según testigos- provino de un policía.
Del desalojo compulsivo ordenado por el juez Ochipinti y con la intervención del fiscal Elpidio González participaron más de cien efectivos de la policía bonaerense fuertemente armados y con apoyo aéreo.
Testigos presenciales afirmaron que la policía irrumpió violentamente y los echó con gases lacrimógenos y balas de goma y plomo. Tras intentar refugiarse en el barrio 22 de Enero, la policía arremetió en las precarias viviendas del barrio y sacó a rastras a varias personas, que luego fueron llevadas detenidas.