El pedido de “humildad” de la presidenta Cristina Kirchner fracturó una de las principales parejas políticas del kirchnerismo bonaerense, de cara a las primarias del próximo 9 de agosto. La que habían conformado el director ejecutivo de la ANSES, Diego Bossio, y el secretario de Seguridad de la Nación, Sergio Berni, quienes en los últimos días se habían entusiasmado con la posibilidad de confluir en una fórmula única para competir por la gobernación.
Sin embargo, con la declinación de Bossio, anunciada a última hora de este martes, sólo Berni quedó en carrera para competir contra Aníbal Fernández, Julián Domínguez, Martín Insaurralde, Patricio Mussi, Fernando Espinoza, Santiago Montoya, Martín Sabbatella, Carlos Castagneto, Fernando Navarro, Gabriel Mariotto y Cristina Álvarez Rodríguez. Y así lo ratificó este miércoles, en declaraciones a radio La Red.
“Nosotros seguimos trabajando fuertemente en este desafío que nos hemos puesto de poder ingresar a las precandidaturas a gobernador”, dijo el funcionario, que de todos modos aclaró: “Si la Presidenta me pide que sirva café en la Gobernación, yo no tengo ningún problema”.
Aníbal, sorprendido por Bossio
El jefe de Gabinete de la Nación, Aníbal Fernández, se declaró sorprendido por el anuncio del titular de la ANSES, Diego Bossio, de deponer su precandidatura a gobernador de Buenos Aires, y aseguró que la Presidenta no le “pidió” que se bajara de esa postulación.
“La Presidenta no le pidió a Bossio que se bajara, así que me sorprendió. Yo hablé con él y no me dijo nada”, comentó el ministro, quien también es precandidato por la Provincia, respecto del anuncio de Bossio.