En el 40° aniversario de la firma de uno de los convenios internacionales más importantes de la historia de la Argentina, el presidente Javier Milei decidió que tenía cosas mejores que aceptar la invitación del Papa Francisco para viajar al Vaticano y, en su lugar, decidió pegar el “faltazo” al acto por el Tratado de Paz con Chile.
Estuvo el canciller chileno pero Werthein fue reemplazado por el embajador argentino ante la Santa Sede, Luis Beltramino.
El gesto despertó polémica y fuertes cuestionamientos por parte de la oposición, que lamentó que la política exterior se haya transformado “en uno más de sus caprichos emocionales”.
En una definición insólita, el canciller Gerardo Werthein confirmó este lunes que el Gobierno no enviará funcionarios nacionales al importante evento diplomático. Los motivos son bochornosos: la decisión se debe a un supuesto “desencuentro” ocurrido entre Milei y su par chileno Gabriel Boric durante el G20.
“Tuvimos algunas circunstancias que aconsejaban que este no es el mejor momento para hacernos presentes personalmente. Ellos conocen lo que ha ocurrido”, agregó el ministro de Relaciones Exteriores.
O sea que el problema fue con los chilenos y no con el Papa, según declaró el Canciller.
🔹 Por un desencuentro con Chile, el canciller Gerardo Werthein no asistió al Vaticano, donde se realizó un acto por los 40 años del tratado que puso fin al conflicto por el Canal de Beagle.
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— La Nación Más (@lanacionmas) November 25, 2024
Pero hay sospechas de que otros temas profundizaron el disgusto presidencial, como la posición de la Iglesia frente a Israel en la guerra que combate en Medio Oriente. Se conoció hace diez días el contenido de un nuevo libro sobre los movimientos migratorios, con una frase acerca de la guerra. Sugirió investigar si Israel estaba cometiendo genocidio con el pueblo palestino de Gaza.
La relación entre el Papa y el jefe del Estado argentino ha ido lentamente deteriorándose este año. Llegaron a su mejor nivel en febrero cuando Milei viajó a Roma para asistir a la canonización de la santa argentina Mama Antula. Alli abrazó efusivamente al Papa y se entrevistó con él.
Pero a mediados de año hubo también un encuentro a raíz del viaje del Presidente a Italia para asistir a la reunión de los siete países más desarrollados. Milei volvió a proporcionarle un saludo efusivo, pero el Papa no lució entusiasta y fue frío con él.
El enfriamiento se pudo constatar sorpresivamente en septiembre, cuando el Papa pronunció un filoso discurso ante los delegados de movimientos populares que acudieron a un encuentro en el Vaticano. A su lado se encontraba Juan Grabois, dirigente justicialista que es también funcionario vaticano.
En su mensaje Francisco aludió varias veces a la Argentina sin nombrarla. Criticó fuerte al gobierno Milei por reprimir a los jubilados. “En vez de pagar la justicia pagó el gas pimienta”, cuestionó. También reveló que un empresario argentino le habló sobre un caso de coimas.
El encuentro fue convocado bajo el lema “Plantando bandera frente a la deshumanización”. El Papa defendió “los derechos sagrados de tierra, techo y trabajo” para la humanidad.
Desde entonces las relaciones no se han recompuesto, aunque el Papa recibió a funcionarios del Gobierno sin presentar objeciones.
📌El sello postal que lanzó hoy el Vaticano con motivo de los 40 años del Tratado de Paz y Amistad entre Chile y Argentina pic.twitter.com/EIxjgbt22Z
— Rodolfo Carrasco (@RodoCarrascoM) November 25, 2024