El martes, se firmó en la Legislatura porteña el dictamen del proyecto que crea el boleto estudiantil gratuito en la Ciudad de Buenos Aires. El despacho se aprobó durante una reunión conjunta de las comisiones de Obras Públicas, Presupuesto, Educación y Transporte.
Varios legisladores que participaron del plenario de comisiones se refirieron al avance del proyecto, que quedó muy cerca de su aprobación en el recinto.
El titular de la Comisión de Educación, Maximiliano Ferraro (Coalición Cívica), afirmó: “Muchas veces cuando discutimos en la comisiones de la Legislatura habíamos planteado distintas etapas de aplicación de boleto estudiantil, no por capricho sino acorde a una estrategia, que tiene que ver con garantizar en primer lugar los 14 años de obligatoriedad que establece la ley”. Por eso, insistió con la idea de convertir el boleto estudiantil en un verdadero “boleto educativo”. También destacó que se incorporó a la iniciativa a dos escuelas que dependen de la Universidad de Buenos Aires: el Carlos Pellegrini y el Colegio Nacional Buenos Aires.
“Desde el FpV celebramos que se haya logrado instalar en la agenda pública y en el debate legislativo la necesidad de un boleto estudiantil. Sin embargo, presentamos un dictamen de minoría que intenta ampliar el proyecto que envió el Poder Ejecutivo, ya que entendemos que este es restrictivo e insuficiente. Desde el FpV nos comprometemos públicamente para transformar el boleto estudiantil, pronto a sancionarse, en un verdadero boleto educativo que abrace al conjunto de los estudiantes y trabajadores de la educación”, manifestó la legisladora Lorena Pokoik, del Frente para la Victoria.
Por su parte, su compañero de bloque Pablo Ferreyra expresó: “Desde 2014 presentamos proyectos para lograr el Boleto Educativo y creemos que debe incluir a todas las modalidades y niveles educativos. El dictamen de mayoría del Pro deja por fuera a muchos sectores del sistema educativo, por eso presentamos junto al Frente para la Victoria un dictamen de minoría que los contempla, esperando que el oficialismo tome las reivindicaciones históricas que contiene nuestro proyecto”.
A su vez, Marcelo Ramal se refirió al despacho de minoría que firmó el FIT: “Nuestro dictamen de minoría incluye a todos ellos. Pero, además, descarta explícitamente cualquier subsidio a las empresas de transporte, una compensación que terminarían pagando todos los trabajadores”, explicó el diputado porteño, quien agregó: “Le hemos arrancado una victoria a un Estado que trabaja todos los días para ajustar la educación pública, contra estudiantes y docentes. Por eso mismo, ese gobierno se las ha arreglado para limitar los alcances de esta conquista, dejando afuera a terciarios, universitarios y trabajadores de la educación, quienes hacen varios viajes por día para ir de un colegio a otro”.