Un chofer de la línea 177 de colectivos, que pertenece a la empresa San Vicente, fue brutalmente atacado por un grupo de delincuentes que intentaron robarle en la localidad provincial de Burzado. Los mal vivientes le cortaron un dedo al trabajador y, tras el lamentable hecho, las líneas 51, 79, 177, 263, 370, 385, 388, 435 y 503 hicieron un paro de casi 24 horas y un corte en la Rotonda de Burzaco, en Ruta 4 y la avenida Hipólito Yrigoyen.
El ataque ocurrió cerca de la 1 de la mañana del sábado cuando el colectivero iniciaba el recorrido hasta Nueva Pompeya.
La víctima fue identificada como Gustavo Esparza de 54 años, quien iniciaba su recorrido en la Estación de Burzaco cuando tres jóvenes lo interceptaron. Se subieron al colectivo y empezaron a exigirle dinero.
En declaraciones a la prensa, Esparza aseguró: “Me decían que yo había sacado plata del cajero. Me sacaron las zapatillas, se bajan y siento que me cortaron. Cuando prendo las luces, me doy cuenta de que me habían cortado el dedo”.
“Se ve que se asustaron por algún movimiento afuera y se bajaron, pero antes le cortaron el dedo meñique. También le tiraron otro cuchillazo y le tajearon la palma de la mano. Tenía 200 pesos y las zapatillas que le habían regalado las hijas”, explicó.
El chofer dijo además que, tras ser atacado, manejó algunas cuadras hasta la entrada del barrio Don Orione, donde habitualmente hay un patrullero, pero que justo en ese momento no se encontraba. Tampoco había nadie en una salita de primeros auxilios ubicada en la zona, por lo que tuvo que ir hasta la comisaría 4°, donde fue auxiliado.
El conductor del 177 está internado fuera de peligro, según indicaron delegados de la línea. Y, después de la medida de fuerza, hubo una reunión con jefes policiales. “Se comprometieron a intensificar los controles y a mejorar la situación en los puntos más peligrosos, que son San José, Don Orione y Burzaco. Es una situación que hubo todo el año pero, nunca tan grave”, explicó otro de los delegados.