La precandidata presidencial de Juntos por el Cambio (JxC), había anunciado que suspendía sus actos de campaña por el crimen de la pequeña Morena en Lanús. Sin embargo, la exministra viajó a Córdoba para encabezar uno en la Plaza de la Música, imprevista última parada del tour bulrrichista.
Pese a estar en la provincia, con el correr de las horas, ante la cadena nacional desde la comisaría de Lanús y con la indignación en el prime time, el acto previsto se desmoronó: fueron suspendidos los números artísticos, apagadas las pantallas gigantes y retiradas las pancartas proselitistas y banderas argentinas que ornamentaban el escenario del tradicional salón.
En su lugar, ganó la sobriedad del negro, y se decidió que no habría la tradicional arenga de cierre, sino un monólogo monocorde.
Patricia Bullrich debió reconfigurar su cierre de una campaña frente a la tragedia: el asesinato de Morena Domínguez, de 11 años, en Lanús, intendencia que comanda su candidato a gobernador en Buenos Aires, Néstor Grindetti y eso se notó el miércoles en la Plaza de la Música. La narrativa de de la exministra de Seguridad en esta campaña era, hasta el miércoles, la de de una generala profeta de la mano dura. Todo eso quedó en tensión con el crimen de Morena camino a la escuela. Y aunque Lanús esté a 712 kilómetros de la Plaza de la Música, la congoja y la incertidumbre sobrevoló el viejo galpón cordobés.
Ese fue el clima entre el público: sombrío, disfórico, contenido. Se oían los murmullos del millar de asistentes que llegaron de distintas provincias, pero no cánticos ni risas, apenas tibios aplausos que aumentaron cuando la exministra de seguridad, pese a todo, se paró al centro del escenario.
Otra vez el dolor. Ahora con el asesinato de Morena, de 11 años. Todo mi acompañamiento y apoyo a la familia y amigos. No podemos seguir viviendo con tanta angustia y miedo. Esto no da para más. Transformaron a la Argentina en un país invivible.
— Patricia Bullrich (@PatoBullrich) August 9, 2023
Ante su núcleo de seguidores, Bullrich dijo a modo de última apelación proselitista: “Debemos reflexionar que este domingo tenemos la posibilidad de cambiar un sistema de no cuida a la gente; que hace de los delincuentes héroes y de las fuerzas armadas victimarios”.
“Nosotros, ustedes lo saben, vamos a ser firmes; les puedo asegurar que voy a hacer todo, todo lo que esté a mi alcance para que tengamos un futuro distinto. Vamos todos por tener un país con justicia, con ley, un país donde no asesinen a los chicos”, cerró Bullrich y se escuchó la única ovación de la noche.