El ministro de Seguridad y Justicia porteño, Eugenio Burzaco, advirtió este jueves por el aumento de los casos de inseguridad y de los delitos leves “producto de la crisis económica” que atraviesa el país, y reclamó al Gobierno nacional por el “problema grave” de los presos en la Ciudad de Buenos Aires.
El funcionario consideró que “hay más delitos contra la propiedad producto de la crisis económica” y remarcó que lo que “han aumentado son los ‘robos simples’, como el robo de celular y los descuidistas”.
“Este es el tipo de robo que ha aumentado, no los homicidios o los delitos violentos. He estado en el Consejo de Seguridad Interior y, lamentablemente, está ocurriendo en todo el país”, afirmó.
Según Burzaco, desde el gobierno porteño se está trabajando en el robo de celulares, que es el más recurrente”. En particular, consideró que apuntan a encontrar los establecimientos de reventa de los aparatos electrónicos sustraídos, y pidió a la ciudadanía hacer la denuncia a la línea 911, que ahora “es más fácil porque no hay que ir a la comisaría.
“Esto nos permite tener mejor información, bloquear el IMEI y nos permite entender la dinámica de estos robos y recuperarlo para devolvérselo al usuario”, puntualizó.
El funcionario del gabinete de Horacio Rodríguez Larreta alertó también por la situación de “cuello de botella” de las personas detenidas de la Ciudad de Buenos Aires: “Tenemos un problema grave con 1300 presos en comisarías en alcaidías. No nos ayuda el Gobierno nacional. En 2020 sólo había 60 y hoy 1300 porque el Servicio Penitenciario Federal (SPF) no nos reciben todos presos. Detenemos mucha gente todos los días”.
De acuerdo a Burzaco, desde el Poder Ejecutivo nacional “aducen razones ideológicas o de cupos en las cárceles” para evitar realizar nuevos ingresos al sistema penitenciario. “Así terminan haciendo cosas peores en términos derechos humanos, porque es peor que esté detenido un preso en una alcaidía que en una cárcel”.
“La Justicia ha fallado con amparos que los tienen que recibir. Nos dan un cupo insuficiente y ha generado este cuello de botella que nos deja preocupados. No podemos no detener a la gente hay que detener a las personas que roban, violan o venden droga”, completó.