De mal en peor. La frase describe a la perfección la situación procesal en la que se encuentra el ex jefe de la Policía Metropolitana (MP), el ex comisario Jorge Alberto ?el Fino? Palacios. El ex integrante de la Policía Federal volvió a sufrir un revés judicial y para colmo de males no es el primero. Antes se había expresado de la misma manera la Sala I de la Cámara Nacional de Apelaciones en lo Criminal y Correccional Federal, y a fines de diciembre del año pasado, la Sala I de la Cámara Federal, conformada por los jueces Eduardo Freiler, Jorge Ballestero y Eduardo Farah, confirmó el procesamiento y la prisión preventiva dictada en su contra en la causa ?James, Ciro Gerardo y otros sobre intervención de la comunicaciones?.
En esta ocasión, los integrantes de la Sala III de la Cámara Nacional de Casación Penal, los camaristas Ángela Ester Ledesma, Liliana Elena Catucci y Eduardo Rafael Riggi, rechazaron a través de un dictamen dado a conocer el jueves 18 y por unanimidad (es decir, que los tres votaron en consonancia) el planteo ?extraordinario? por nulidad y el pedido de excarcelación presentados el 15 de enero, a través de un recurso ?de queja? por Diego Richards y Manuel María Beccar Varela, abogados defensores del ex capo de la Metropolitana. Los magistrados tenían a su cargo la causa número 11.970 titulada ?Palacios, Jorge Alberto s/recurso de casación?. En concreto, la resolución dictada por los jueces ?mantendrá detenido hasta la realización del juicio oral por las escuchas ilegales? al Fino, avalando, además, los delitos por los cuales fue procesado. ?No le asiste razón a la defensa cuando sostiene que el procesamiento del encausado es arbitrario e inmotivado. Por el contrario, la resolución cuenta con fundamentos suficientes, mínimos, adecuados y serios que obstan su descalificación como acto jurisdiccional válido?, afirmaron los camaristas en un párrafo de una resolución cercana a las veinte carillas.
Palacios se encuentra detenido en el Penal de Marcos Paz desde la noche del martes 17 de noviembre, hace poco más de tres meses, ya que se encuentra procesado en la causa por escuchas ilegales que lleva adelante el juez federal Norberto Oyarbide y que se inició por la intervención ilegal del teléfono del líder de la agrupación de Familiares y Víctimas del atentado a la AMIA, Sergio Burstein. El magistrado procesó al Fino junto a otras 12 personas, acusándolas de integrar una asociación ilícita y de los delitos de fraude contra la administración pública y escuchas ilegales, además de dictarle un embargo a cada una de ellas por 250 mil pesos. La idea de la defensa ponía todas las fichas en el máximo tribunal en materia penal luego de lo fallado por la Cámara Federal, que había confirmado la denegatoria de excarcelación dispuesta por el juez Oyarbide. La iniciativa para que la Cámara de Casación Penal revise lo actuado por los camaristas federales se transformó en uno de los últimos recursos para logar la excarcelación de Palacios, luego de las negativas de la Cámara de Apelaciones y la del magistrado federal.
Sin embargo, el pedido fue rechazado y de esa manera se abrió el peor panorama para el Fino, que es quedar detenido hasta el juicio oral, que ni siquiera tiene fecha y se puede demorar una eternidad, con lo cual el hombre, que no está acostumbrado a estar entre rejas, se puede convertir en una bomba de tiempo para varios políticos?, contó a Noticias Urbanas un letrado que trabaja en la defensa del ex jerarca de la Metropolitana. Varias de las fuentes consultadas por NU señalaron que la prolongación del encierro de Palacios traerá ?consecuencias no deseadas?. Según lo manifestado por uno de los investigadores que trabaja en la pesquisa que lidera Oyarbide, ?a Palacios no le quedará más alternativa que hablar y contar lo que sabe?. Según esta postura, el ex comisario ya no podrá negar su responsabilidad en el caso de las escuchas ilegales y deberá aceptar su responsabilidad en el tema con el agregado, nada menor, de que todo lo actuado contaba con la venia del Jefe de Gobierno de la Ciudad, Mauricio Macri, lo que es lo mismo que afirmar que el ingeniero sabía a la perfección que se estaban pinchando teléfonos. Sin embargo, hay una teoría que se da de bruces con el planteo anterior y a la que Noticias Urbanas tuvo acceso. Este argumento es sostenido por un sector de la defensa de Palacios, y según el mismo, el ex Federal estaría dispuesto a hablar para ?responsabilizar al Gobierno nacional y a un sector ultrakirchnerista de la Secretaría de Inteligencia del Estado (SIDE) como los verdaderos culpables del caso de las escuchas?. Para sostener su teoría, Palacios intentará relacionar al espía James, ex integrante de la Federal, con miembros del organismo de inteligencia nacional, asegurando, además, que James siempre tuvo por objetivo perjudicarlo. Las casi 200 llamadas que Oyarbide afirmó que existieron entre el Fino y James, según la defensa, sólo son 35 y la mayoría de ellas duran entre seis y ocho segundos, con lo cual el espía llamaba para hablar cosas intrascendentes con el único objetivo de sumar llamadas para perjudicar a su interlocutor. El dato que vincularía a James con la SIDE se centra en los días 22 y 24 de septiembre de 2009, en los que el espía fue a la Secretaría de Inteligencia a retirar las grabaciones que le había solicitado a la Justicia de Misiones y desde ese día no volvió a llamarlo. ?Esto es muy llamativo, ya que James llamaba seguido al Fino pero se olvidó de comunicarse con él cuando tenía las grabaciones?, afirmaron en las cercanías del ex comisario. Con las teorías contrapuestas, nadie se atreve a vaticinar el explosivo futuro que esconde el detenido en Marcos Paz.