El domingo no será un día más. Las PASO nacionales determinarán el futuro del Frente Cambiemos, que lleva tres precandidatos presidenciales: Mauricio Macri, Elisa Carrió y Ernesto Sanz.
De los tres quedará uno. Y es obvio que esa interna traerá coletazos en el frente. Tanto para el que gane como para el que pierda.
Algunos de los cimbronazos ya se empezaron a sentir.
Según pudo saber Noticias Urbanas los tres precandidatos tendrán búnkeres propios. El arreglo entre los tres, es que los perdedores vayan al final de la jornada al búnker del ganador como buenos demócratas.
El tema es que según las encuestas, el ganador sería Macri. Estos datos fueron confirmados a NU por voceros tanto del radicalismo como de la Coalición Cívica-ARI.
Frente a ese panorama, tanto Carrió como Sanz le pusieron una condición a Mauricio: nada de lluvia de globos amarillos y baile alocado delante de los perdedores. Esto sería tomado por Carrió y Sanz como una burla que no están dispuestos a aceptar.
Aunque desde el Pro algunos dijeron que no habría un festejo desmedido, desde otro sector aseguraron que si ganan festejarán como siempre.
Todo se definirá el domingo a la noche. Pero el Frente Cambiemos ya empezó a crujir.