El asesinato de Cristian Velázquez, el kiosquero muerto durante un intento de robo en Mar del Plata, generó un fuerte impacto que llevó a que este martes el Jefe de la Policía Bonaerense, comisario general Javier Villar, removiera de su puesto al jefe de la Jefatura Departamental de General Pueyrredón, comisario mayor Luis Alberto Senrra.
La decisión de relevarlo de sus tareas fue porque el funcionario “no cumplió con las expectativas” en el cargo.
En este sentido, señalaron que desde que asumió su rol, en junio de 2024, el territorio marplatense “registró un aumento de homicidios que contrasta con la baja generalizada que hubo en el resto de la provincia”. En detalle, entre enero y febrero del año pasado hubo 18 asesinatos en ocasión de robo contra 8 en el mismo período de 2025.
Senrra fue nombrado para liderar la cúpula bonaerense en Mar del Plata, sustituyendo a José Segovia, quien se encontraba bajo acusaciones de malversación de fondos y abuso de poder. Segovia fue arrestado en el contexto de una investigación por corrupción.
El reemplazo
Ahora, quien asumirá como nuevo jefe de la departamental será el comisario mayor Edgardo Vulcano, quien hasta ahora se desempeñaba como jefe del Departamento de Asuntos Extranjeros, Migraciones y Culto de la Policía de la Provincia de Buenos Aires.
Asimismo, seguirá en su cargo el jefe de la DDI, el comisario mayor Juan Lucero, que está a cargo de la investigación por la muerte del kiosquero que ya tiene un sospechoso detenido.
Se trata de un hombre identificado como “Nacho”, la persona que habría conducido la moto en la que se movían los delincuentes que atacaron al comerciante en su local ubicado sobre la avenida Jacinto Peralta Ramos al 700.
Los investigadores de la DDI de Mar del Plata identificaron al sospechoso en la madrugada del martes, gracias al análisis de las cámaras de seguridad de la zona. Durante el operativo, los agentes también incautaron un ciclomotor Gilera de color azul, que se habría utilizado en el asalto. Los allanamientos se llevaron a cabo en el barrio Pueyrredón, a aproximadamente 30 cuadras del establecimiento de Velázquez.
En este momento, los policías están en la búsqueda intensiva de “Guachín”, quien sería su presunto cómplice y cuenta con varios antecedentes, según informaron. El fiscal Alejandro Pellegrinelli está a cargo del caso y deberá verificar si el detenido estuvo involucrado en el intento de robo y el homicidio. En caso afirmativo, “Nacho” permanecerá en prisión.
Cómo fue el asesinato
Cómo ocurrió el crimen La víctima supuestamente intentó protegerse utilizando un gas pimienta que guardaba oculto bajo el mostrador, tal como había hecho en ocasiones previas. Al intentar alcanzarlo, los criminales le dispararon antes de huir sin lograr su objetivo.
Cuando los paramédicos del SAME llegaron a la escena, el kiosquero ya estaba muerto. “Fue una secuencia muy rápida, huyeron sin concretar el robo”, describió Pellegrinelli ante medios locales presentes en el lugar.
El funcionario del Ministerio Público confirmó que la víctima sufrió un único balazo letal con entrada “en la zona frontal del cráneo y salida en la parte posterior”.
Además, precisó que en el lugar “no hay vainas”, pero sí “una trayectoria balística, y sería un arma calibre .32 o .38″.
Aunque no trascendieron las grabaciones, en el comercio hay cámaras de seguridad que registraron el robo y a los autores del crimen. Domos de la Municipalidad de Mar del Plata, a la vez, captaron el momento de la fuga.
Protesta vecinal
El crimen provocó un gran impacto en Mar del Plata y un fuerte enojo en los ciudadanos por la creciente inseguridad en la ciudad.
En este sentido, remarcaron que el kiosquero ya había sido víctima de otros seis asaltos a su local antes de ser asesinado y que nunca se trabajó en el lugar para reforzar la policía.
Por esta razón, los vecinos de Velázquez colocaron carteles en homenaje a él sobre la persiana de su local y marcharon este martes a la tarde en reclamo de más seguridad y justicia por el crimen de Velázquez y cortaron la avenida Peralta Ramos al 700.
Una vecina que conocía al kiosquero asesinado manifestó: “No hay seguridad, no tenemos patrulleros. Para mí, el Intendente no tiene nada que ver, esto es responsabilidad de la Provincia. He sido clienta de Cristian. Él era muy respetuoso, atento y trabajador. Acá está el barrio. Siempre estamos con miedo, nos viven robando, ya no sé de qué forma nos podemos cuidar”.
Otro hombre que fue parte de la movilización dijo que tienen “padres, hijos, que viven encerrados en la casa”. Y agregó: “Vivimos muy mal”. Otra mujer que fue testigo del primer robo al kiosquero asesinado contó que “40 minutos tardaron en llegar los policías”