Después de que la propia Estela De Carlotto negara una recusación a la jueza Servini de Cubría por el proceder en el caso que involucra a su nieto recuperado, Ignacio Guido, dos fiscales fueron los que decidieron tomar cartas en el asunto.
Hernán Schapiro y Marcelo Molina pidieron al juez federal local, Manuel Humberto Blanco, que solicite la inhibición de la jueza María Romilda Servini de Cubría, para seguir instruyendo la causa por la apropiación del nieto de Estela de Carlotto y la remita para ser incorporada al expediente que tramita en el juicio del centro clandestino “La Cacha” por el secuestro y homicidio de Laura Carlotto.
“A nuestro entender cobra real importancia el hecho de que la apropiación de Guido Montoya Carlotto (falsamente inscripto como Ignacio Hurban), tuvo como antecedente inmediato, necesario e inescindible el secuestro y privación ilegal de la libertad de su madre, Laura Carlotto, en el centro clandestino de detención conocido como La Cacha“, sostienen.
Explicaron que los elementos de prueba incorporados “revelan que la privación ilegal de la libertad de Laura Carlotto en el referido centro, su posterior homicidio, y la sustracción de su hijo, se perpetraron en el marco de una unidad histórico-contextual, con lo cual sólo artificialmente resultarían divisibles“.
“Prueba de ello es que después de dar a luz Laura Carlotto fue nuevamente trasladada a La Cacha, por lo que el parto y la sustracción de su hijo constituyen eslabones de una evidente continuidad delictiva”, destacaron Schapiro y Molina, según informó el sitio Fiscales.gob.
La presentación de los fiscales se dio luego de la denuncia realizada por el secretario de Derechos Humanos de la Nación, Martín Fresneda, ante la Unidad Especializada en Casos de Apropiación de Niños y Niñas durante el terrorismo de Estado, que coordina Pablo Parenti.