Unos 65 millones de años después de la última extinción masiva, que marcó el fin de los dinosaurios y del 75% de las especies del Planeta Tierra, un grupo de científicos sugiere que el sexto evento de extinción masiva ya está en marcha. Pero aseguran que esta es la única extinción masiva causada por el ser humano, y en ella intervienen el cambio climático, la destrucción del hábitat, la contaminación y la agricultura industrial.
La investigación, que se publicó recientemente en la revista Biological Reviews, y que publica el diario Perfil, es el trabajo de biólogos del Centro de Investigación de Biociencias Manoa Pacific de la Universidad de Hawái con la Escuela de Ciencias y Tecnología de los Océanos y la Tierra (SOEST), en cooperación con el Muséum National d’ Histoire Naturelle de Francia.
El autor principal del estudio, Robert Cowie, explicó: “Las tasas de extinción de especies aumentaron drásticamente y la disminución de la abundancia de muchas poblaciones de animales y plantas está bien documentada, pero algunos niegan que estos fenómenos equivalgan a una extinción masiva”.
Y agregó: “Esta negación se basa en una evaluación muy sesgada de la crisis que se centra en los mamíferos y las aves e ignora a los invertebrados, que por supuesto constituyen la gran mayoría de la biodiversidad”.
Al extrapolar las estimaciones obtenidas para los caracoles terrestres y las babosas, Cowie y sus coautores estimaron que desde el año 1500, la Tierra ya podría haber perdido entre el 7,5 y el 13 % de los dos millones de especies conocidas, la asombrosa cifra de 150.000 a 260.000 especies.
Según Cowie, “incluir a los invertebrados fue clave para confirmar que efectivamente estamos presenciando el inicio de la sexta extinción masiva en la historia de la Tierra”.
El investigador destacó “informes anecdóticos masivos y estudios científicos” que indican que “la biota de la Tierra está en la sexta extinción masiva. A pesar de la retórica sobre la gravedad de la crisis, y aunque existen soluciones correctivas y se les señala a los tomadores de decisiones, está claro que falta voluntad política”.
Y reclamó: “Negar la crisis, aceptarla sin reaccionar o incluso alentarla constituye una derogación de la responsabilidad común de la humanidad y allana el camino para que la Tierra continúe en su triste trayectoria hacia la Sexta Extinción Masiva”.
Anteriormente, la Tierra vio cinco eventos de extinción masiva, incluido uno que se cree que fue causado por un asteroide gigante que terminó con la era de los dinosaurios hace 66 millones de años. Los científicos creen que el 76 por ciento de las especies del mundo fueron aniquiladas por el impacto del asteroide y sus consecuencias posteriores.
En las extinciones masivas, al menos tres cuartas partes de las especies dejan de existir en unos 3 millones de años, algunos científicos creen que, al ritmo actual, podríamos estar en camino de perder ese número en apenas unos pocos siglos, ya que solo en las próximas décadas, al menos un millón de especies corren el riesgo de desaparecer.
▶ Qué se puede esperar que ocurra en un Sexto Evento de Extinción Masiva
✔Crisis alimentaria: “Creo que lo primero que veremos es que nuestro suministro de alimentos empieza a reducirse de forma notable, ya que gran parte de nuestra alimentación depende de la polinización”, afirma Corey Bradshaw, profesor de ecología global en la Universidad Flinders de Australia del Sur, que utiliza modelos matemáticos para mostrar la interacción entre los seres humanos y los ecosistemas.
✔Inundaciones: También se espera que la calidad del suelo se deteriore si los microorganismos críticos mueren. Aunque están poco representados en los datos, algunos investigadores creen que pueden estar desapareciendo a un ritmo más rápido que otras especies. Su desaparición podría agravar la erosión, lo que a su vez provocaría más inundaciones, así como una menor fertilidad, que a su vez repercutiría en el crecimiento de los cultivos.
✔Cambios en el clima: La Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación calcula que a partir de 2015 se talaron unos 10 millones de hectáreas de bosque al año. A medida que los bosques retroceden, es probable que los patrones de lluvia cambien, ya que la evapotranspiración –el proceso en el que la humedad se devuelve a la atmósfera a través de la evaporación y la transpiración de las plantas– se ve afectada, secando aún más el paisaje. Con la pérdida de árboles y vegetación se prevé que el cambio climático empeore, desencadenando más fenómenos meteorológicos extremos. Las condiciones más secas y los bosques insalubres también aumentan el riesgo de incendios forestales. Además, las pérdidas de cosechas y otras amenazas ecológicas probablemente desencadenen migraciones masivas para escapar del hambre y de los conflictos por la disminución de los recursos.
✔Más pandemias, mucho más letales: Los investigadores advierten de que la pérdida de biodiversidad podría provocar un mayor riesgo de pandemias, ya que los animales salvajes y los seres humanos entran en contacto más estrecho a través de la fragmentación del hábitat y la alteración de los sistemas naturales. Se cita como ejemplo el brote de ébola de 2014 en África Occidental, que se cree que fue causado por niños que jugaban en un árbol hueco lleno de murciélagos.
✔Escasez de agua: Gran parte del agua dulce del mundo procede de humedales que purifican y redistribuyen esta fuente de vida. Por ejemplo, la torre de agua del Himalaya, que se alimenta de ríos y humedales, abastece a unos dos mil millones de personas. Si sistemas como estos se colapsan, como resultado de impactos que incluyen la floración de algas y el retroceso de la vegetación, la humanidad podría perder mucha agua para beber y para uso agrícola.