La Sala III de la Cámara de Apelaciones en lo Contencioso Administrativo y Tributario de la Ciudad de Buenos Aires, resolvió por mayoría indemnizar con 27.050 pesos a los propietarios de un automóvil por los daños y perjuicios generados por la caída de un árbol añoso sobre el vehículo.
La causa fue iniciada en 2007, cuando un árbol cayó encima de un Renault Scénic en la calle Urquiza, entre Rondeau y la avenida Caseros. La caída produjo la rotura del techo, puerta trasera izquierda y sus molduras, guardabarro trasero izquierdo y sus molduras, tapizado y molduras de techo, portaequipaje, tapa de baúl, molduras de parante trasero, cerradura de puerta trasera izquierda, parabrisas delantero y los cristales del parante trasero y la puerta trasera izquierda.
En la resolución firmada por jueces porteños se decidió negar el recurso de apelación interpuesto por los dueños del coche que cuestionaban el monto indemnizatorio establecido en primera instancia por considerarlo bajo. También se resolvieron rechazar los argumentos del Gobierno porteño que alegaba no ser imputable de responsabilidad por considerar al hecho como “casual y fortuito”, y concedieron parcialmente los agravios planteados por la administración comunal en relación también a montos, en este caso considerados excesivos, y a la tasa de interés aplicable.