A fines de 2006, la por entonces legisladora porteña, Inés Urdapilleta, presentó un proyecto para declarar a la milanesa napolitana como patrimonio cultural de la Ciudad. En el mismo, se armaba un combo que también incluía a los sorrentinos, la pizza con fainá, la fugazzeta, el famoso postre “vigilante” (queso y dulce, para los más jóvenes) y el vermú.
Un asesor de la diputada, había explicado en ese momento que “vos viajás afuera y lo que más extrañás son los olores y sabores. Eso también es cultura”. Justificando así la particular propuesta.
Ahora bien, pensando en la milanesa como el plato más fácil de preparar en casa, ¿cuánto aumentaron sus ingredientes desde 2007 al día de hoy?
La carne más barata para su elaboración, la cuadrada de novillito, pasó de valer $ 8,99 en septiembre de 2007, cuando todavía Néstor Kirchner era presidente, a $ 53 al mes de julio de 2014, “Precios Cuidados” mediante. Por lo que el aumento en los últimos siete años fue del 589,54 por ciento. Vale recordar que en febrero de 2011, Cristina Kirchner lanzó el plan “Milanesas para todos”, donde se ofrecía el corte de carne a $21 pesos el kilo.
En tanto que el pan rallado, que en 2009 registraba un valor de $3,99, hoy oscila entre los 11,25 y 11,70. Vale destacar que también existe la posibilidad de rallar nuestro propio pan, que en 2007 costaba –por kilo- $2,49 y en la actualidad, según la Secretaría de Comercio, cuesta $18.
En consecuencia, el empanado para las milanesas, en su versión manufacturada, aumentó entre 282 y 293 por ciento. Mientras que en su variante artesanal y más trabajosa, la suba fue del casi 723 por ciento.
Luego, los huevos, ingrediente clave en la preparación de la milanesa, registraron una suba del 231,8 por ciento entre junio de 2008 y julio de 2014. Pasando a valer, la media docena, $9,25. Cuando, recién iniciado el gobierno de Cristina Kirchner, su precio era de $3,99.
Una vez pasadas por huevo y pan, las milanesas están listas para ser cocinadas. Para ello, necesitamos de aceite.
La botella de litro y medio, hoy en día, según el programa de control de precios impuesto por el Gobierno nacional, marca un valor de referencia de $13,40. Lo que se traduce en un incremento del 252,3 por ciento en relación a marzo de 2008, cuando el gobierno implementó un acuerdo de precios, donde estos fueron retrotraídos a los valores de diciembre de 2007.
Finalmente, para tener el plato completo, resta el acompañamiento: las papas fritas. Desde septiembre de 2007 a la actualidad, el kilo de papa, registra una suba de $4,37, según datos oficiales. Ya que en muchos supermercados, la variedad que suele conseguirse, no baja de los 8 o 9 pesos. Lo que implica un aumento del 416,6 por ciento.
Según los datos recopilados, preparar el típico plato porteño, con el pan rallado más barato ($11,25) tiene un valor de $92. Cuando antes, el mismo era de $24,95. Por lo que comer milanesas con papas fritas en casa cuesta un 368,7 por ciento más desde que Cristina Kirchner es presidente de la Nación.
Del jamón y el queso, con salsa, para hacerlas napolitanas, mejor ni hablar. Eso sí, la Coca-Cola, infaltable en muchas mesas porteñas, que hoy tiene un valor de referencia de $14, en su versión de litro y medio, en 2007 se vendía a $6,15 por 2,25 litros.