El jefe de Gabinete, Horacio Rodríguez Larreta, encabezó este miércoles una nueva reunión de gabinete en Parque Lezama, nueva sede del Ministerio de Desarrollo Urbano, donde los efectos de la crisis energética fue uno de los temas principales.
En ese contexto, el mandatario porteño afirmó: “Todo el equipo de la Ciudad está en la calle y alerta”. La ola de calor de los últimos días golpeó fuerte en la Ciudad, donde alrededor de 20 mil usuarios permanecen sin luz.
Asimismo, Rodríguez Larreta destacó que “por primera vez, el gobierno nacional, cosa que no había hecho el anterior, reconoce el problema” energético. Y apuntó: “No hay manera de solucionar un problema si no se lo reconoce como tal”.
Por otra parte, el alcalde de la Ciudad agradeció la adhesión voluntaria de las empresas de vía pública que tienen transiluminados para reducir “tanto su intensidad lumínica como los horarios en los cuales los carteles están prendidos”. Otra medida adoptada desde el Gobierno porteño es la reducción de la iluminación en edificios públicos y monumentos.
Además, con el compromiso de la Cámara Argentina de Anunciantes, Coca Cola, Publicidad Sarmiento y la Asociación Argentina de Empresas de Publicidad Exterior, se apagarán 22 pantallas publicitarias las 24 horas del día desde hoy hasta el 3 de enero, y durante enero y febrero en el horario de 0 a 6. La gran mayoría están ubicadas en torno al Obelisco.
El Gobierno de la Ciudad comenzó hace tiempo a implementar el recambio de su iluminación pública a LED, con el objetivo de reducir el consumo energético. El jefe de Gobierno explicó que hoy “el 60% de la iluminación pública es LED, y está el proyecto para que hacia fines del 2016 se complete la renovación”.
En esa línea, Rodríguez Larreta añadió que la Ciudad de Buenos Aires “será una de las primeras en el mundo con toda la iluminación pública con LED”.
Finalmente, el jefe de Gobierno resaltó los ejemplos del Palacio Lezama, edificio donde actualmente trabajan 3500 personas, y la Sede de Gobierno porteño ubicada en Parque Patricios, como dos hechos concretos de sustentabilidad y cuidado del medio ambiente, en los cuales se consume un 70% menos de energía en relación a los edificios que el Ejecutivo de la Ciudad ocupó en el centro.
