El municipio más porteño del conurbano bonaerense está en ebullición, tanto en la oposición como en el oficialismo. A pesar de contar con un electorado mayoritariamente opositor, el armado kirchnerista en Vicente López despertó ampollas en las últimas semanas tras la designación del ex arquero Sergio Goycochea como el designado por Daniel Scioli para arrebatarle votos al intendente Jorge Macri.
A principios de año, en la primera visita del gobernador a Mar del Plata de la que fue parte también el intendente de La Matanza, Fernando Espinoza, se formalizó con una foto –fiel al estilo sciolista- la candidatura del “Goyco”, una cuña que el presidenciable quiere meter al macrismo en uno de los dos territorios que gobierna.
Pero lo del ex arquero estrella de la Selección Nacional despertó molestias al interior del kirchnerismo, como admitió anoche, en declaraciones en el programa Intratables, la diputada kirchnerista –tal vez la más enfática de todas-, Diana Conti.
“El Frente para la Victoria está muy bien organizado en Vicente López, con sus locales partidarios y sus casas culturales. Y como Scioli decidió postular al ‘Goyco’, la militancia y los dirigentes me pidieron que yo sea candidata (a intendenta)”, explicó Conti, acompañada a su derecha por Gustavo Marangoni, presidente del Banco Provincia y precandidato a jefe del gobierno porteño por el sciolismo.
Inmediatamente vino la lógica repregunta si iba a aceptar el desafío, y fue tajante: “No, no voy a ser candidata. Creo que el Frente para la Victoria debe ir unido en Vicente López”, dando por muerta una versión que había circulado la semana pasada, luego de aquella foto de Scioli en Mar del Plata.
El hecho es que, más allá de los dichos de la diputada, el kirchnerismo no ha creado dirigentes en Vicente López, ya que el intendente anterior, “El Japonés” García, fue uno de los primeros radicales K, por lo que Néstor Kirchner en su momento no buscó enfrentarlo localmente, hasta que perdió en 2011 ante Jorge Macri. El remanente de lo que tuvo García mas lo que pueda aportar el presidente del bloque de concejales kirchneristas, Leonardo Rial, y lo que sume Conti, es todo lo que ostenta el kirchnerismo en el municipio.
De allí la necesidad del gobernador de buscar instalar a una figura conocida como el futbolista para traccionar fotos en forma más fácil y barata. Pero se trata de un distrito de casi 300 mil votantes muy influenciados por la dinámica política nacional, debido a su cercanía con la Capital Federal, además de un nivel socioeconómico superior a la media. Por lo que la torta se reparte más en el espacio opositor.
Por eso es que Massa apuró los tiempos y no quiso esperar a su amigo Jorge Macri e instaló al diputado Adrián Pérez como el candidato suyo en el distrito, pidiéndole a su operador territorial Christian Raff que se corra de la contienda para abocarse a la campaña nacional. Aunque por ahora, Pérez despierta bastante recelo entre sectores massistas, y no deja de ser considerado un outsider.
Consultado por Noticias Urbanas, el entorno del intendente dice estar tranquilo, y asegura tener encuestas que señalan que Macri sería reelecto por el 52% de los votos si las elecciones fueran hoy. Mientras tanto, y hasta mayo, Jorge Macri tiene pensado seguir jugando a la indefinición, o para algunos, continuar la simulación de que es precandidato a gobernador sólo para no dejarle terreno libre a María Eugenia Vidal (la elegida por Bolívar 1).