La Presidenta encabezó esta noche, cerca de las 20, la ceremonia central por el Día de la Soberanía Nacional, en conmemoración del 167 aniversario de la Batalla de la Vuelta de Obligado.
“Hoy no fue una huelga, ni un paro, ni siquiera un piquete”, consideró Cristina Kirchner al hablar sobre la protesta que se hizo sentir con fuerza en todo el país, principalmente en Buenos Aires y el área metropolitana.
La primer mandataria puso como ejemplo de dirigente sindical a su madre, a quien definió como “delegada gremial durante 30 años” y desafió: “A ella le tocó convocar a muchas huelgas, pero jamás le tocó obligar a alguien a participar. La libertad de huelga es como todas las libertades”, señaló.
Cristina además apuntó contra “todos los dirigentes, principalmente a aquellos que dicen y quieren representar a los trabajadores”. Advirtió: “Soy sincera de corazón, hoy no fue una huelga, ni un paro, ni siquiera un piquete. Hablemos de apriete o amenaza”.
“A mí no me corren con amenazas”, sostuvo la jefa de Estado, tras lo cual agregó: “Me voy a bancar las que me tengas que bancar”.
Cristina habló en el Parque Histórico Natural ubicado en la localidad bonaerense de Obligado, partido de San Pedro, 164 kilómetros al norte de esta capital, en el lugar donde ocurrió la contienda, que se convirtió en un hito histórico en la defensa de nuestro país.
