La charla quedó definida por etapas. En la nueva conferencia de prensa que realizó el jefe de Gobierno, Aníbal Ibarra, la tarde de ese domingo 2, se dedicó a anunciar nuevas medidas de seguridad para los boliches bailables y además, cuestionó el papel de control que deben desempeñar los Bomberos en caso de incendio. El jefe comunal ratificó que ningún boliche podrá reabrir sin una nueva verificación y también tendrán que acreditar un plan de evacuación y exhibir en un lugar visible para el público, la capacidad permitida para el lugar. De esta manera, decidió revocar todas las habilitaciones existentes en la Ciudad.
Al referirse a los bomberos, Ibarra fue muy duro. "Ellos son los especialistas. En los locales bailables el control de aptitud contra incendios no lo hace la Ciudad sino Bomberos, y éste estaba actualizado", manifestó el ex fiscal al referirse a la habilitación que tenía el local.
Ibarra también destacó que los nuevos controles se realizarán cada tres meses y los llevará a cabo tanto la Ciudad como Bomberos.
Por otro lado, el jefe de Gobierno, afirmó que el cargo dejado vacante por el secretario de Justicia, Juan Carlos López, será ocupado provisoriamente por el jefe de Gabinete, Raúl Fernández, quien se encontraba presente en el momento de la conferencia de prensa.
Ante los duros reclamos de los familiares, Ibarra manifestó que entendía las críticas, ya que los manifestantes habían perdido a un ser querido en la tragedia.
Para finalizar, el jefe comunal anunció la implementación de dos programas de asistencia, uno para los sobrevivientes de la catástrofe y otro para los familiares.
Las últimas palabras de Ibarra estuvieron dedicadas a Omar Chaban, el dueño de República Cromañón. "Actúo de forma criminal", lo fustigó el mandatario porteño.