Esa hipótesis, nada disparatada, podría traer también consecuencias inesperadas para todos los bandos. ¿Kirchner
se declararía prescindente en la segunda vuelta si Macri o Telerman fueran las opciones? Hay opiniones encontradas, pero algunos analistas piensan que así sería.
En las cabeceras de playa del PRO, sospechosamente se alienta esa entente (entre Telerman y Olivera-Carrió). "Si hay acuerdo, el gobierno le declarará la guerra a Telerman y el enfrentamiento con Filmus será aún más duro", dice hoy un matutino porteño.
Al parecer, de esa cuestión habrían hablado ayer durante un almuerzo Macri, Michetti, Rodríguez Larreta y los asesores de imagen, el ecuatoriano Jaime Durán Barba y su socio, Santiago Nieto.
Acaso sea una visión optimista. ¿Kirchner declarará la guerra a Telerman?, ¿Telerman no pedirá como prenda de cambio el silencio de Elisa Carrió? ¿Piensan que el alcalde ignora que los exabruptos de la chaqueña suenan a chantaje?
En esa reunión, Durán Barba preguntó quién había sido "el idiota" a quién se le ocurrió poner en acto la presentación de Macri como candidato junto a una nena pobre. El silencio fue estruendoso.
Durán Barba es una especie de Dick Morris latinoamericano, aquel estadounidense, favorito de las prestaciones que pagaba Antinio de la Rúa.
El ecuatoriano es el inventor del "salto al bache" de la campaña del 2005. El hombre vivió y estudió en la Argentina de los 70, creyó (o cree) que hay un "peronismo de izquierda", tanto que se hizo militante de la JP y estuvo entre quienes fueron a recibir a Perón a Ezeiza.
"Los políticos no se dan cuenta que a la actual generación de votantes le importa como tema político central el sexo. A un pibe le inquieta más que su pareja quede embarazada que cómo paga la Argentina su deuda externa", dijo Durán en un reportaje hace unos meses.
Y agregó que "esta sociedad nueva, con el reinado de internet, nos ha llevado a una erotización del mundo. Y es en ese plano donde se están definiendo nuevas izquierdas y derechas".
Pero, obviamente, él vende otra cosa: frente a sociedades que descreen de la política, el desafío de Macri consiste en presentarse como una opción que interpele al sistema polìtico por fuera del mismo, abandonando la disputa ideológica que el electorado considera intrascendente.
Durán Barba está actualizado. El estilo confrontativo no da resultados, dice, y sólo los da en sociedades atrasadas como las nuestras, pero en su visión, el empresario es una suerte de adelantado de ese estilo que ya se impone en el mundo industrial.
"El estilo confrontativo puede dar rédito, pero es provisorio y finalmente es un problema. Forma parte de la sociedad machista antigua, que empezó a morir en los 50. A partir de entonces, la sociedad occidental se hizo femenina".
Acaso sea otra visión optimista.
Entre sus creaciones de última generación, figura una pregunta que los medios ingleses se hacían en los 60, cuando el furor por los Rolling Stones era imparable. "¿Dejaría usted a su hija casarse con un Rolling Stone", que cambió por otra: "¿Con quién le gustaría que se hija se casara?".
Entre Macri, Filmus y Telerman, "la mayoría eligió a Mauricio", dice, aunque eso no dice mucho. ¿Quién contestaría otra cosa con la plata que tiene el hijo de Franco Macri?
Entretanto,y hasta que se completen las fórmulas, los métodos siguen suendo los clásicos, y los pronósticos, una lotería que puede cambiar en menos de lo que canta un gallo, precisamente por ese diagnóstico detectado por el asesor ecuatoriano y que la señora Carrió repite y repite.
"Yo no mido a las personas por las ideologías sino por las integridades personales". Mitterrand, Clinton, Mao, Nixon, Kennedy y Nelson Mandela tendrían que cortar mucha tela para entender qué se está discutiendo en la Argentina contemporánea.
