“La norma establece que toda persona capaz mayor de 18 años puede en forma expresa manifestar su voluntad negativa o afirmativa a la donación de los órganos y tejidos de su propio cuerpo, restringir de un modo específico su voluntad de donación a determinados órganos y tejidos, y condicionar la finalidad de la voluntad de donación a alguno de los fines previstos en esta ley”, explican los fundamentos del proyecto, que tuvo despacho de la Comisión de Salud.
Se trata de dos proyectos de ley de autoría de la legisladora de Vamos Juntos, Mercedes De Las Casas: por un lado la adhesión a la Ley Nacional N° 27.447 (conocida como “Ley Justina”) y por el otro la modificación de la Ley N° 3.294 de la Ciudad de Buenos Aires, que regula la actividad de donación de órganos en el ámbito de la Ciudad.
La “Ley Justina”, fue sancionada el 4 de julio del 2018. El objetivo de la misma es regular las actividades vinculadas a la obtención y utilización de órganos, tejidos y células de origen humano, modificando la norma que regulaba dicha actividad, la Ley Nacional N° 24.193 y su modificatoria N° 26.066.
“Venimos trabajando este proyecto en conjunto con la Comisión de Salud de la Legislatura. El hecho de que hoy sea una realidad es el resultado del compromiso que tenemos con la vida y especialmente con la familia Lo Cane y los papás de Justina”, dijo la diputada De Las Casas.
La nueva norma establece que toda persona capaz mayor de dieciocho años puede en forma expresa manifestar su voluntad negativa o afirmativa a la donación de los órganos y tejidos de su propio cuerpo, restringir de un modo específico su voluntad de donación a determinados órganos y tejidos, y condicionar la finalidad de la voluntad de donación a alguno de los fines previstos en esta ley. Dicha expresión de voluntad debe ser manifestada por escrito, a través de los canales previstos en la Ley, pudiendo ser revocada también por escrito en cualquier momento.
“El punto diferencial de esta nueva norma es que, de no encontrarse restringida la voluntad afirmativa de donación, se entiende que la persona es donante. Esto es de gran ayuda para sacar la responsabilidad a las familias de firmar una declaración jurada para dar su consentimiento, situación que lo único que hacía era sumar un conflicto en un momento tan difícil para ellas”, agregó la legisladora autora del proyecto.
“Quiero destacar que hoy somos un país referente en lo que respecta a la donación de órganos en Latinoamérica, y las estadísticas indican que este 2019 comenzó con cifras récord. Esto significa que muchas de las personas que se encontraban en lista de espera recibieron el órgano que necesitaban para seguir adelante. Es importante destacar que cualquiera de nosotros puede atravesar una situación de necesidad y que es fundamental acompañar y mejorar los procesos desde el Estado”, finalizó la diputada porteña.