El diputado nacional Francisco de Narváez advirtió que si los opositores no se unen “el Frente para la Victoria seguirá gobernando”, aunque admitió que la posibilidad de un frente con varios partidos es “poco probable”.
De Narváez, quien intentará volver a competir por la gobernación bonaerense, se refirió a la necesidad de que se una la oposición porque, dijo que ante “el 30 por ciento consolidado contra pedacitos desunidos, gana el 30 por ciento”.
Asimismo, renovó sus críticas a las políticas de seguridad al señalar que por “el avance del crimen organizado, la disputa callejera por los territorios, permitir que el blanqueo de capitales en Argentina crezca”.
Y, cuestionó que “la plata mal habida en la Argentina es bienvenida. Estamos cometiendo una cantidad de errores. Yo no puedo creer en la intencionalidad, pero suceden. Hoy la ventaja la tiene el delincuente. El riesgo de que una persona delinca, la detengan, la juzguen y cumpla la condena es cercano a cero”.
Por otra parte, apuntó que la probabilidad de que “el ciudadano que sale de su casa, sea víctima -ojalá nunca- de un homicidio, es altísima. La balanza está al revés”.
Además, en una entrevista con el portal marplatense 0223, señaló que la responsabilidad es “de todos los dirigentes políticos, y me incluyo. Una política de seguridad ciudadana no puede ser politiquería. También digo que no la puede resolver un intendente ni un gobernador solo. Lo que sí, no he visto que ningún país la resuelva sin una decisión presidencial. Y acá no se toma”.
De Narváez señaló por otra parte que “el Frente para la Victoria tiene diez años de historia y de consecuencias y no los veo decididos a tener una política férrea de seguridad ciudadana. El resto de los candidatos, en términos electorales, diciendo lo mismo, pero tienen la necesidad de unirse”.
“Creo que si seguimos así, el Frente para la Victoria seguirá gobernando el país”, añadió.
El diputado señaló que “seguir así” implicaba “no uniendo a la oposición, y no digo juntando o rejuntando. Digo unirla. Si todos estamos diciendo lo mismo el problema es la inseguridad, la inflación, habernos desprendido del mundo, no tener valores y principios. Si todos pensamos lo mismo, no será tiempo de que digamos ‘Pongámonos a laburar cuatro años todos en una agenda común'”.
Respecto de las alianzas electorales, indicó que “una cosa es juntarse electoralmente, que se termina la noche de la elección; esa fue mi experiencia, mala. Y otra cosa es unirse con un programa de gobierno, por ende una forma de vida”.
“El ejemplo es lo que debe cundir. Todos decimos lo mismo, pero por qué no lo hacemos”, señaló aunque admitió que eso “posible es, hoy es poco probable. Hay que trabajar para que sea una realidad. El tiempo es marzo o abril”.
E insistió con que “si la gente para esa época no ve algo consistente va a decir ‘más vale malo conocido que bueno por conocer'”.