En medio del silencio del kirchnerismo frente a las primeras medidas económicas que anunció Silvina Batakis para tranquilizar a los mercados el alfil de la Vicepresidenta en la Casa Rosada, Eduardo “Wado” de Pedro, recibió el martes por la tarde a la nueva ministra, aunque en su entorno aseguraron que se limitaron a discutir temas pendientes vinculados a la gestión que llevó a cabo la funcionaria hasta la semana pasada al frente de la Secretaría de Provincias que depende del Ministerio del Interior.
Batakis era la responsable de dos funciones centrales para De Pedro: tenía a su cargo por Aportes del Tesoro Nacional (ATN) –central en la relación de la Nación con las provincias– y coordinaba el Fondo Fiduciario Federal de Infraestructura Regional, mecanismo para financiar obras de infraestructura en todo el país.
Las personas que se ocupaban de estos temas eran Karina Angeletti y Martín Pollera, la actual secretaria de Política Económica y el secretario de Comercio Interior del Ministerio de Economía.
No hubo, según aseguraron fuentes cercanas al ministro, ninguna referencia a su nuevo cargo. De hecho, no hubo una comunicación oficial sobre el cónclave.
“Nadie se esperaba su salida, se reunieron para ordenar el área”, explicaron fuentes oficiales. La reunión, que ocurrió en el despacho de De Pedro, en la Casa Rosada, sirvió para organizar la sucesión, aunque De Pedro todavía no resolvió quien la reemplazará.
Aparte del silencio de La Cámpora y del Instituto Patria, dos anuncios de protesta de los sectores de izquierda del Frente de Todos aliados al kirchnerismo sumaron incertidumbre al escenario político-económico posterior a la conferencia de Batakis.
Por un lado, la Central de Trabajadores de la Argentina (CTA), que conduce Hugo Yasky -referentes sindical cercano a Cristina Kirchner-, dijo que impulsará movilizaciones en todo el país en rechazo al ajuste. Mientras que el titular del Movimiento de Trabajadores Excluidos (MTE), Juan Grabois, de perfil independiente pero alineado con el kirchnerismo a partir del rechazo al acuerdo con el FMI, convocó a asambleas para evaluar una protesta en las calles el 20 de julio.