El presidente y el vicepresidente de la Obra Social Buenos Aires (OSBA), Patricio Datarmini y Mario Gygli, respectivamente, fueron convocados a informar -este miércoles a la mañana en la Legislatura por los diputados porteños de las comisiones de Salud y Educación- sobre la desregulación que marca la Ley 472, y que no se realizó debido a un recurso de amparo presentado por Datarmini. En un debate áspero y polémico, se entremezclaron internas gremiales y proyectos para modificar las estructuras de la obra social de los empleados estatales de la Ciudad.
"La obra social solidaria no se negocia así tengamos que hacer un año de paro y tomar todas las dependencias municipales", dijo Datarmini, entre abucheos y aplausos. Del otro lado de la vereda, la Asociación de Médicos Municipales -que no tuvo injerencia formal en el debate debido a que únicamente hablaron los legisladores y los directivos de OSBA- reclamó la democratización de la obra social, a través de un debate sobre el papel de la patronal y de los gremios, y su inmediata desregulación.
Las expresiones de Datarmini no son particulares sino que responden a un acuerdo de la comisión directiva de la OSBA, en el que se estableció que este sistema de salud se defenderá "hasta las últimas consecuencias", porque temen un éxodo masivo de los empleados de que más aportan.
Con esta misma frase, hace un mes los médicos municipales sintetizaron las intenciones de defender la libre elección de la obra social, debido -según denuncian en la OSBA- a que tienen un proyecto para crear su propia obra social, que estaría bastante avanzado en los tramites de la Superintendencia de Salud de la Nación.
Ante esta jugada el presidente de OSBA, Datarmini le dijo que hablaban mucho de libertad pero poco de solidaridad y que "ya que se quieren llevar los sueldos más altos, que se lleven también los jubilados y la parte de la deuda que les coresponde. La solidaridad empieza por casa y en temas de salud siempre los sueldos más altos soportan el peso de los que menos ganan" finalizó el gremialista.
DESREGULACIÓN, NORMALIZACIÓN Y REFORMAS ESTRUCTURALES
Los legisladores Bisutti, Daniel Bravo (UCR), Vilma Ripoll (IU), Santiago De Estrada (PJ), Maria Lucila "Pimpi" Colombo (PJ), Clori Yelicic (PS), Abel Alexis Latendorf (Piquete Socialista) y Juliana Marino (Peronismo Independiente), y los directivos Datarmini y Gygli, acordaron en la reunión de este miércoles avanzar en la conformación de una comisión -conformada por todos los sectores involucrados- para debatir el futuro de la OSBA. De este debate saldrían nuevos acuerdos sobre qué modelo de sistema de salud deberá adoptar la obra social de los trabajadores estatales porteños.
La OSBA tiene aproximadamente 110.000 afiliados activos, que aportan el 5 por ciento de su sueldo, dos puntos más que los de cualquier otro gremio. Hasta enero estuvo intervenida por Datarmini y Gygli, pero a fines de ese mes el jefe de Gabinete, Raúl Fernández, le envió al presidente de la comisión interventora una carta documento en la que le exigía que, en un plazo de 48 horas, cumpliera con la norma.
Constatado el incumplimiento y habiéndose agotado los plazos, se dispuso a fines de enero la normalización de OSBA. Pero a pesar de haberse completado el directorio, tanto el número dos del gremio de los municipales como Gygli siguen siendo los hombres fuertes de la institución.
A mediados de febrero, la libre elección de la obra social establecida por la Ley 472, fue parada por un juez federal que falló a favor de un amparo presentado por los directivos de OSBA. Hasta el momento, la definición de este problema sigue estando en manos de la Justicia.
