Esta mañana se detuvo nuevamente a un grafitero que intentaba dañar una formación en el taller San José, de la Línea E, luego de que desde el puesto de monitoreo local, se detectara que una persona circulaba con aerosoles en el andén. Según comunicaron desde Subterráneos de Buenos Aires, se detuvo al joven, de nacionalidad chilena, antes de que pudiera pintar el coche.
La causa se encuentra en manos de la Fiscalía en lo Penal Contravencional y de Faltas número 40, a cargo del Blas Matías Michienzi.
Esta detención se suma a la de dos jóvenes alemanes que fueron sorprendidos la semana pasada mientras pintaban grafitis en la estación Juramento de la Línea D.
Fuentes ligadas a Sbase afirman que la detención del joven responde al “refuerzo en materia de seguridad” que la empresa ha montado, a partir del cual citan “la presencia de más de 500 efectivos de la Policía Metropolitana en andenes y formaciones”, “la instalación de casi 300 cámaras de seguridad en puntos estratégicos de la red, que son supervisadas las 24 horas desde el centro de monitoreo”.
Como resultado de estas iniciativas, durante 2015, el vandalismo en el subte disminuyó a la mitad respecto del año anterior. Asimismo, esta mejora –agregan– impactó en la suma necesaria para el desgrafitado de coches: mientras que en 2014 esta tarea implicó un total de 6.000.000 millones de pesos, el año pasado el gasto se redujo a 2.900.000 millones.
