El presidente de la Cámara de Diputados y precandidato presidencial por el oficialismo, Julián Dominguez, consideró que la imputación por intento de encubrimiento en al causa AMIA de la presidenta Cristina Kirchner es un “verdadero dislate”.
Además, cuestionó el “carácter desmedido que la denuncia de origen ya contenía” en alusión a la que presentó el fiscal Alberto Nisman cuatro días antes de morir con un balazo en la cabeza y sostuvo que “de manera totalmente infundada se llegó a requerir la citación a prestar declaración indagatoria de la presidenta de la Nación y su Canciller”, Héctor Timerman.
En un comunicado, se refirió al dictamen del fiscal Gerardo Pollicita al sostener que su pedido de imputación “se trata de la opinión” del funcionario “que requiere ahora de una evaluación por parte del juez de la causa quien deberá definir si se inicia una investigación penal, o por el contrario, tal requerimiento de instrucción es desestimado ‘in limine'”.
“La denuncia de encubrimiento con la que se pretende enjuiciar a nuestro gobierno resulta un verdadero dislate, ya que ningún otro realizó tantos esfuerzos para que el atentado a la AMIA fuera debidamente esclarecido y sus culpables recibieran el condigno castigo”, opinó.
En cuanto al requerimiento fiscal, destacó que “ahora utiliza en todo momento un tono conjetural al describir el hecho que fue denunciado, y expresamente señala que este ‘se trata de una versión hipotética, no demostrada, sobre la existencia de cierto acontecimiento'”.
“El encuadre legal que propone el fiscal resulta absurdo”, sostuvo y alertó que la hipótesis “sostenida en la denuncia y que se hace eco el fiscal resulta un relato novelado de hechos que jamás existieron, que en el peor de los casos no pudieron tener comienzo de ejecución en términos penales y, finalmente, que carecen de cualquier motivación explicable”.
Domínguez cuestionó las “manifestaciones exacerbadas e histéricas que tanto la oposición como los medios periodísticos concentrados le pretenden asignar a esta situación”.
