Horas atrás, Gustavo Melella, intendente de Río Grande (Tierra del Fuego), se presentó en sede judicial junto a su abogado, Francisco Ibarra, en la causa iniciada en su contra por presunto abuso sexual avalado por un abuso de poder: “Si me van a ganar las elecciones el día de mañana, que me la ganen en las urnas no en la justicia”, dijo Melella, dejando en claro que él consideraba que había una operación política en su contra, inspirada y ejecutada por rivales políticos. Melella no comulga con la Administración fueguina que lidera Roxana Bertone.
Él insistió: “Que me la ganen discutiendo ideas, proyectos e ideología, pero no metiéndose en mi vida privada”. Luego afirmó que contra él se movía“alguien poderoso hay, no sé quién es” pero “hay una presión desde lo económico, lo político y lo mediático que es muy grande”.
Ahora, esta denuncia de Melella comienza a tomar forma: Norma Gauto reveló que 2 ministros del Gobierno Provincial (uno de ellos el ministro de Obras Públicas de la Provincia, Luis Vázquez), entregaron viviendas y trabajo en planta permanente en el Estado Provincial a hijos de Hugo Moya para que declarara contra el intendente de Río Grande.
Esto convertiría todo lo que se escribió y dijo durante los días recientes sobre Melella en un caso de “fake news” o noticias falsas.
Las viviendas estaban en jurisdicción de la Jefatura de Gabinete de la Provincia, que disponía de ellas como soluciones habitacionales para personal sanitario que se radicara en Tierra del Fuego.
Gauto declaró en sede judicial en la mañana de este miércoles 07/11, y aseguró que mantuvo comunicaciones con Moya, quien le detalló la situación.
Para acreditar sus dichos, Gauto presentnes del software de mensajería WhatsApp, debidamente certificadas ante escribano público, que respaldan estas dó las conversacioeclaraciones.
Y estas comunicaciones fueron reconocidas por el propio Moya. Por este motivo es enorme el escándalo en Tierra del Fuego.
El abogado de Melella, Francisco Ibarra, expresó: “Lo que se está demostrando y que es muy preocupante son las motivaciones de los denunciantes, lo que pone de manifiesto una situación de una gravedad inusitada y que pediremos que se investigue en profundidad”.
“Una vez frente al juez, Moya reconoció no conocer a los denunciantes y no pudo aportar ningún tipo de nombres, detalles, lugares, fechas ni información fehaciente más allá de algunas generalidades absolutamente imprecisas”, agregó el letrado.
Ibarra recalcó que “hasta el día de hoy no existe un solo elemento de prueba que respalde las acusaciones absurdas que se hacen al Intendente”; y dijo que “es mucho más lo que se dice públicamente que lo que realmente existe en las actuaciones”.