Los rectores de las universidades nacionales de Quilmes y Avellaneda reconocieron la labor de la expresidente de la Nación, Cristina Fernández de Kirchner, entregándole sendos doctorados ‘honoris causa’ -el honor más importante que entregan las casas de estudio-, en un acto que se realizó en el gimnasio de la Universidad de Quilmes.
Los rectores Mario Lozano y Jorge Calzoni encabezaron el acto, al que la expresidente fue acompañada -entre otros- por el exgobernador de Buenos Aires, Daniel Scioli; su exministro de Economía, Axel Kicilloff; el ex titular de la Afsca, Martín Sabbatella; el intendente de Berazategui, Patricio Mussi; la legisladora bonaerense, Mayra Mendoza y el presidente del bloque del Frente para la Victoria en la Cámara de Diputados, Héctor Recalde.
Luego, llegó el turno de la expresidente para hablar sobre el presente de un país que muestra un mapa radicalmente modificado desde que ella dejó el poder. En primer lugar, CFK -como se la suele nombrar en las redes- cuestionó el método que utiliza por estos días el INDEC para medir la canasta alimentaria y la pobreza, que alcanzó, según sus técnicos, al 32,2 por ciento de los argentinos. “Lo que nadie quiere explicar es que en realidad la medición de la canasta debe ser en la medida del consumo de un país y debe ser homogénea para ser comparable. Pero además de lo deductivo y el análisis, vamos a lo empírico. Ustedes deben conocer la realidad de otros países, ya que hay argentinos que han viajado por el mundo. ¿Pueden decir que nuestro país, la Argentina, es el país más pobre de América Latina después de México?”, ironizó la exmandataria.
Luego, cerró su análisis con un comentario incisivo. “¿Qué se busca con esto? Con Daniel decíamos que lo que buscan es en unos meses tener otra medición y decir que bajaron la pobreza. Pero creo que no, hay otro objetivo. Después que salió esto, se vio en los titulares de los diarios que, pese a la cantidad de planes sociales, creció la pobreza. Y todos los discursos y los análisis eran así, un tiro al corazón de las políticas compensatorias como la AUH”, remató.
Paralelamente, un colectivo de intelectuales que se autodenomina Plataforma 2012, que conforman, entre otros, José Emilio Burucúa, Roberto Gargarella, Héctor Bidonde, Pablo Alabarces, Beatriz Sarlo, Maristella Svampa, Adriana Genta, Alejandro Katz, Diana Kordon, Rubén Lo Vuolo, Gabriela Massuh, Daniel Muchnik, José Miguel Onaindia y Patricia Zangaro firmaron una innecesaria declaración en la que cuestionaron la validez de la distinción con la que fue honrada la que fue elegida dos veces como presidente de los argentinos.
La declaración de los intelectuales liberales -que tienen todo el derecho a expresar su opinión, inclusive en esta ocasión- abunda en lugares comunes y en dar por comprobada la comisión de delitos e infracciones por los/as que la expresidente no fue procesada ni, menos aún imputada, en muchos casos.