Jaime Durán Barba, uno de los principales asesores políticos que tiene Mauricio Macri, expuso en una columna de opinión algunas pautas para evitar que las consecuencias de una “campaña sucia” puedan tener algún tipo de efecto para un candidato en las urnas.
Según el gurú ecuatoriano, la “campaña sucia” consiste en “mentir, calumniar y generar miedo en los electores”. Estrategia que a su parecer es “totalmente inútil”. “Halaga el ego de candidatos con personalidad paranoica a quienes les gusta revolcarse en los albañales, pero no sirve para mover votos”, escribió en diario Perfil.
“Sólo pueden hacer daño si el agraviado desciende al nivel del atacante y trata de refutar las calumnias”, apuntó el consultor estrella del PRO.
En esa línea, Durán Barba sostuvo que “la campaña sucia es inútil porque los votantes tienen más sentido común que los políticos, se ríen de sus miedos y votan por quien les puede ser útil”.
Asimismo, en la publicación el asesor de Macri se defiende y niega ser quien embandera este tipo de estrategias. “Cuando en el curso del semestre pasado una alumna mexicana afirmó que se había inscripto en mi materia porque tenía la vocación de hacer campañas sucias, tuve que decirle que estaba equivocada de universidad y de profesor, que la idea de que patrocino ese tipo de campañas fue calumnia de un perdedor poco inteligente, que instaló esa campaña sucia en mi contra”, esgrimió.
“Durante décadas he impartido cursos, he publicado dieciséis libros y en ninguno de ellos dije que es recomendable hacer campañas sucias”, se reivindicó.
Para el ecuatoriano “existen personas que dicen ser consultores políticos especializados en campañas sucias” y realizó una analogía con el fútbol para clarificarlo: “El equivalente deportivo sería que algunos directores técnicos se anuncien como especializados en comprar árbitros. Hacen el ridículo”.
“En Argentina, algunos sienten fascinación por las campañas sucias”, sostuvo Durán Barba y recordó que “en el año 2005 sintieron que serían derrotados en la Ciudad y difamaron a Enrique Olivera con una calumnia torpe”.
Pero ese no fue el único episodio que citó. “En 2009 armaron una causa judicial calumniosa contra Francisco De Narváez por tráfico de efedrina, que después de eso seguramente estará luchando para que las cosas cambien”, recordó.
Finalmente, Durán Barba hizo mención a que “en el año 2011 el más elemental de ellos inventó una campaña sucia tratando de que lo coronen rey del albañal”. Y dejó la incógnita: “Lo relataremos con detalles en nuestro próximo artículo”.