La concejal Marcela Durrieu es muy conocida por aquellos que seguían con atención el mundillo político de mediados de los años ’90. Con carácter fuerte y voz propia, fue diputada durante los últimos cuatro años del menemismo, su entonces marido era Secretario de Deportes, el histórico “Pato” Galmarini. Ambos militaban en los ’70 en la organización Montoneros.
El tiempo pasó, ellos se divorciaron, pero siempre permanecieron en política. Desde 2013 volvieron al primer plano mediático por ser suegros del candidato a presidente, Sergio Massa. Durrieu conoció al tigrense cuando tenía 21 años e hizo de celestina para que se ponga de novio con su hija, Malena Galmarini. “Yo los presenté”, recuerda sonriente. Su hijo Sebastián es senador provincial y uno de los principales operadores del Frente Renovador.
La familia Durrieu-Galmarini mantiene un histórico enfrentamiento con la familia Posse, aunque la política, como siempre demostrando ser el arte de lo posible, los hizo coexistir en el FR por dos años hasta que el intendente rompió con Massa en marzo pasado. Posiblemente las dos clanes más emblemáticos de ese distrito tan particular que es San Isidro, ahora vuelven a enfrentarse en las elecciones para intendente. Y Durrieu no se calla nada.
-Desde el retorno de la democracia, la familia Posse (primero Melchor y luego Gustavo) gobiernan San Isidro. ¿Cómo se explica?
-Es que Posse el peor de los barones del conurbano. Es un barón con todas las de la ley. El apriete en la compra de voluntades, clientelismo… la metodología es la misma de cualquiera salvo que él cuenta con que la mitad de la sociedad sanidrisense que no necesita ningún servicio municipal porque es ABC1. Lo única que necesitan ellos es seguridad y ahora ni eso porque han armado sistemas propios con custodias privadas. Igual Posse se desentiende de todos los problemas diciendo que la seguridad y la salud son de las provincias.
-Pero tantos años al frente del municipio, algo pasa…
-Creo que son dos cosas distintas. Con Melchor Posse puedo tener muchas diferencias, pero era un dirigente político en serio y además era un militante de su municipio, que estaba, hablaba con los vecinos atendía a la gente. Gustavo hereda el poder. Melchor urbanizó gran parte del distrito, hasta el hospital lo empezó Melchor. Pero hay que entender que la conformación de la población es un factor. Un sector es indiferente y cree el discurso. Posse tiene 60 millones para hacer publicidad y publicita cosas increíbles.
-¿Cómo cuáles?
-Levanta un centro de salud que no tiene nada, en la esquina de la villa La Cava. Publicita su sistema de salud que es antiguo como si fuera la gran cosa. Muestra estadísticas de San Isidro que, obviamente si tenés 50% de sectores altos la mortalidad infantil te va a dar baja, ahora si lo midieras en la villa, las cosas serían diferentes. Y tiene altísima protección mediática. La denuncia del plan de viviendas que administró él y está en curso no aparece en ningún lado. Casos como el de (Fernando) Niembro puedo dar 18, sin embargo nadie habla. Y también es un campeón de armar listas.
-¿Cómo es eso?
-Como hacen todos los barones del conurbano. Por ejemplo, Margarita Stolbizer no tiene nadie en San Isidro, entonces Posse le arma una lista, toma un hombre de él y se la hace y así dispersa el voto de la oposición, y cada tanto le entra (al HCD) un concejal por voto arrastre que le va a responder a él. Y otro factor para perdurar es que testea muy bien a los presidenciables. En una elección fue con Carrió, en otra con Kirchner, otra con el Frente Renovador y ahora con Macri. Otra cosa que hace de barón del conurbano es las agresiones, ahora nos secuestran materiales y le pegaron un culatazo a un militante nuestro.
-¿Cómo ve la gestión, qué deudas quedan?
-San Isidro. es muy diferente. Es el distrito más rico per capita del país, y su presupuesto es 3 mil millones de pesos. En lo particular, solamente con lo que se va en sobreprecios, licitaciones amañadas, se podría hacer más. Por ejemplo, se gastó 7 millones en merchandising del municipio. No estoy a favor de judicializar la política pero podría pasármela en la justicia penal. Con leer el boletín oficial alcanza, no soy el inspector Clouseau. Hay muchas cosas que hacen ruido y las carencias que hay que resolver no se resuelven porque no quieren o porque se roban la plata como la del plan federal de viviendas.
-A pesar de ser el distrito más rico, hay demasiadas villas allí…
-Hay 11 villas, entre la más famosa está la Cava, la más grande. Pero si la ves, es pequeña, ¿cómo en 30 años no pudieron resolverla? En San Fernando (municipio fronterizo al norte de San Isidro) hicieron tres túneles, un teatro, se iluminó todo, y acá nunca inauguraron los tres pisos de arriba del hospital. La pregunta del millón es donde está la plata del municipio, cómo puede ser que sea el más rico y haga menos obras que municipios mucho más pobres. Los impuestos son altísimos y hay tasa de industria y comercio que duplica ingresos brutos y no se usó para ninguna mejora.
-En caso de ganar, ¿cuáles serían los cambios?
-Yo tendría una mirada de jefe de gobierno, no de intendente, que es antigua, que es solo administrar espacios públicos. Mirarlo como desarrollo local, usar las tasas para incentivar actividad económica, generar empleo. Y la transparencia y la participación, creo que hay que preservar los espacios públicos y el patrimonio histórico. Recomponer la trama urbana de San Isidro, q Boulogne y Villa Adelina no parezcan otro planeta. Además de hacer en el Bajo los túneles bajo nivel, hay que mejorar la accesibilidad de Béccar y Villa Adelina. Lo que creo es que el intendente tiene muchas posibilidades de modificar el municipio, dependiendo las prioridades que tenga. Yo no me opongo a que haya yacht club pero no que sólo sea eso.
-Usted se opuso muy fuerte a los cambios en el tradicional Hipódromo, ¿en qué quedó eso?
-El tema del Hipódromo es un ejemplo de destruir el patrimonio histórico. Él quería hacer edificios de departamentos en esos terrenos. Hay cosas que son legales y no son éticas. Eso está frenado en la Justicia pero él va a intentar volver sobre el tema seguramente. Es increíble, el abogado de la municipalidad litiga a favor del Jockey Club en vez de los vecinos.
-¿Cómo fue la convivencia con Posse dentro del massismo?
-Yo nunca estuve a favor de que él esté dentro, nunca fui en la lista con él. Yo fui en colectora y no fui a las PASO con Posse (en 2013). Fue un error que ya admitimos. Ganamos con poquito en 2013, y de golpe vinieron todos los oportunistas de todos los colores, lo que hace siempre Posse. Me opuse a incorporarlo y perdí la discusión y bueno, uno forma parte de un partido y no comparte todas las decisiones. Era un “chupamassa” total…Sergio también sabía quién era él, el tema es que todos le decían que era intendente de un distrito rico y bueno….todos caen en la misma trampa. Ahora estoy feliz que no está más con nosotros.
-Si pierde, ¿qué destino le espera?
– Yo creo que vamos a ganar las presidenciales y la gobernación, veremos. Yo seguiré siendo concejal. Hace 50 años milito en San Isidro y así seguirá.