Bajo el lema "Oíd mortales: Sin techo pero con derecho", organizaciones de cartoneros, okupas, travestis y cooperativistas ofrecieron un panorama de sus carencias y elaboraron propuestas en materia de salud, reinserción, trabajo y derechos humanos durante el plenario del "Diálogo por la gente de la calle", que se llevó a cabo el sábado en el auditorio de la Manzana de las Luces.
El encuentro fue organizado por el Programa de Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD), la secretaría de Desarrollo Social del gobierno porteño, y la revista "Hecho en Bs As", en el marco del llamado Diálogo Argentino.
Durante las jornadas, que se realizaron del lunes al miércoles, la gente de la calle aseguró que "no queremos asistencialismo ni que nos den una mano, sáquennos las manos de encima y déjennos crecer".
También cuestionaron que "el Estado no cumple los derechos humanos, ni es capaz de escuchar las propuestas populares"; y reclamaron "achicar las edades jubilatorias, una educación libre y gratuita o subsidiada a modo de inversión y un sistema de salud descentralizado con un horario no menor a 12 horas de consulta".
El objetivo de la iniciativa es ofrecer un espacio de interlocución que permita recoger las opiniones, expectativas, propuestas y necesidades de las organizaciones que trabajan con gente de la calle, al mismo tiempo que informar sobre su situación a la opinión pública y generar un plan de acción concreto.
Lo más emotivo de la jornada de clausura fue la proyección de un video testimonial, elaborado por los propios participantes en estos días, que refleja el pensamiento y las vivencias de la gente de la calle. Aplaudido de pie por los presentes, rescata los sinsabores de quienes "viven sin un horizonte" y de una realidad que crece día a día en Buenos Aires, pero también la solidaridad entre quienes se sienten "excluidos del sistema".
Los sin techo tuvieron, además, la posibilidad de dialogar con los responsables de distintos programas sociales del gobierno porteño Sara Cánepa (Desarrollo Social), Gabriela Alegre (Derechos Humanos) y Marcelo Magdalanes (Sin Techo), Carlos Cersale (Derechos Humanos de la Cancillería), y Carmelo Angulo Barturén (PNUD), uno de los promotores de esta idea.
Cabe mencionar que el último informe realizado por el programa Buenos Aires Presente (BAP) data de noviembre de 2000 y contabiliza 1.103 personas que duermen en las calles de la ciudad, de las cuáles 700 cuentan con un alto nivel de cronicidad.
A este número hay que sumar las 15.000 que viven en casas ocupadas y las 9.400 que habitan en albergues municipales u hoteles financiados por el gobierno porteño.
