A pesar de que algunos funcionarios porteños abrigaban la esperanza de que la firma del Pacto Fiscal era inminente, el acto se demoró al menos por una semana. Las negociaciones vienen de larga data, pero finalmente pareciera que la Ciudad de Buenos Aires cobraría de ahora en más un porcentaje -de algo menos del uno y medio por ciento- de la Coparticipación Federal y ya no una suma fija de 153 millones de pesos anuales como hasta ahora.
Tan complicadas fueron las negociaciones que al menos tres veces los funcionarios anunciaron la culminación de las tratativas al periodismo especializado, para luego avisar del diferimiento de la solución esperada. Todas las demoras están centradas en los ìtems que conforman la "letra chica" del acuerdo, entre ellos el porcentaje de la Coparticipación Federal y las condiciones operativas del Banco Ciudad.
Si el acuerdo fuera exitoso y los números se mantuviera dentro de los límites en los que se discutió a lo largo de esta semana, la Ciudad de Buenos Aires recibiría, a partir de la firma del Pacto Fiscal, una suma anual cercana a los 300 millones de pesos.