El Banco Central de la República Argentina (BCRA) redujo este jueves al 70% anual la tasa de referencia que se encontraba en un 80% luego de una baja desde el 110% que aplicó hace un mes. Según argumentó la máxima entidad monetaria, esta decisión, que reduce directamente los rendimientos de los ahorristas, es consecuencia de la desaceleración inflacionaria.
Tras esta medida, es de esperar que los bancos bajen el interés que pagan a los tenedores de plazos fijos, lo que acentuará la licuación de los pesos atesorados.
Desde la asunción de Santiago Bausilli al frente del Central, ya se dispuso un descenso de la tasa del 133% al 110% el 18 de diciembre de 2023, y otra de 30 puntos el 11 de marzo último. En ese momento, la autoridad financiera también desactivó la obligación de los bancos de pagar un mínimo estipulado por los depósitos a plazo, para fomentar, según precisó entonces, la competencia entre las entidades bancarias.
De acuerdo a lo expresado por el BCRA, la baja del rendimiento puede estimular la aparición del crédito en momentos en que se agudiza la recesión. Por ello, en un nuevo comunicado indicó que, entre las razones de su determinación, se encuentran factores de equilibrio monetario, cambiario y de reducción de la inflación.
“Tras la corrección inicial de precios relativos en diciembre 2023 se observa una pronunciada desaceleración de la inflación, a pesar del fuerte arrastre estadístico que acarrea la inflación en sus promedios mensuales”, señalaron en el escrito.
Por otra parte, el BCRA resaltó que “los relevamientos de precios de mayor frecuencia han resultado útiles para apreciar la dinámica mensual punta a punta. En los meses que se avecinan tomarán mayor relevancia en el diagnóstico de la trayectoria de la inflación las mediciones de inflación subyacente o núcleo, en vista de los ajustes de tarifas reguladas de servicios públicos anunciados”, consideró.
Entre los factores de equilibrio cambiario, la entidad cambiaria subrayó la “acumulación sostenida de reservas internacionales”. También destacó la estabilidad de la brecha entre la cotización oficial del dólar y las paralelas y la corrección a la baja en la cotización de contratos de dólar a futuro sobre el tipo de cambio oficial.
En otro orden de las cosas, anunció la desactivación del swap con el Banco Internacional de Pagos (BIS, por sus siglas en inglés): “De esta manera, las reservas brutas del BCRA ya no incluyen el monto de esta facilidad como tampoco sus pasivos en moneda extranjera, sin afectación a la posición neta de reservas”, explicó.
Por último, respecto de una potencial nueva caída en los rendimientos de los plazos fijos, se estima que podría impulsar a los ahorristas a desprenderse de esas inversiones y pasarlas al dólar, lo que apuntalaría su valor en momentos en que la oferta aumenta.