A pocas semanas de las PASO, la carrera electoral navega entre la incertidumbre y la esperanza dentro de los diferentes espacios políticos y, aunque varias provincias ya pasaron por esa etapa, las sorpresas fueron más de las esperadas.
Elecciones en Santa Fe: ¿una prueba más o un laboratorio?
Asimismo, Santa Fe no fue la excepción, a causa del efecto que generó el batacazo que dio el radical y exministro de Seguridad de la provincia, Maximiliano Pullaro, que destrozó a la senadora nacional Carolina Losada en la primaria para gobernador.
Si bien quedan pocas dudas de que Unión por la Patria (UxP) perderá la provincia, pocos previeron la diferencia de 38 puntos que obtuvo Unidos para Cambiar Santa Fe, el gran frente de la oposición que se unió para disputarle el poder al oficialismo provincial, representado por Omar Perotti.
Pero la competencia electoral no quedó sólo entre ambos precandidatos –Pullaro y Losada- debido a que, más allá de que ninguna elección provincial puede extrapolar su resultado a lo nacional, la interna incluyó a los dos aspirantes a la Presidencia de la Nación de Juntos por el Cambio: Horacio Rodríguez Larreta y Patricia Bullrich.
El jefe de Gobierno porteño logró otra victoria provincial, ya que apoyó a Pullaro, mientras que la dirigente del Pro perdió una de sus batallas, yendo con Losada.
En política, la prueba de ensayo y error se repite en cada elección y siempre sirve para que los heridos rearmen sus tropas y demuestren que ciertos resultados pueden ser replicados en otros escenarios.
La campaña de Losada se centró en atacar a su adversario, hasta al punto de llegar a tratarlo como un cómplice del narcotráfico, lo que obligó a éste a tener que dar explicaciones sobre su gestión cuando fue ministro de Seguridad provincial. El mismo tono que utilizó Losada es el que está planteando Bullrich frente a Larreta, que posiblemente revise su estrategia electoral y modifique su discurso, aunque eso implique perder su esencia.
Se viene observando hasta ahora que los triunfos electorales marcan hacia dónde va el electorado, que a pesar de la volatilidad, se mantiene en el centro y en la moderación, factores que juegan a favor del jefe de Gobierno porteño. Así, la ancha avenida del centro, como la llamaba antiguamente el ministro de Economía Sergio Massa, sigue vigente.
Algo similar se pudo observar con la campaña del libertario Javier Milei, que empezó muy radicalizado contra la “casta política” y hoy bajó mucho en las encuestas. Esta es otra muestra de que, si bien la sociedad se encuentra en una suerte de burbuja cotidiana, sin esperanzas y con cierta apatía hacia la política, no adhiere a los discursos que abandonan la moderación.
Por el contrario, los políticos tradicionales que muestran una trayectoria en el tono de los consensos, se mantienen más vivos que nunca en la competencia electoral.
Si se comienzan a analizar los datos que muestran las elecciones provinciales que se realizaron hasta el momento, se puede dilucidar que al oficialismo le queda poco margen, debido a que, aunque resta ver qué sucederá en la Ciudad de Buenos Aires y en la provincia de Buenos Aires, cabe preguntarse si en otros distritos grandes puede haber un triunfo de Unión por la Patria, lo que es difícil. Si bien el efecto sorpresa aún puede aparecer, lo cierto es que, desde lo factible, el panorama no es muy alentador.
¿Qué pasará con el nuevo Congreso de la Nación?
En cuanto al Congreso de la Nación, en el caso de repetirse los datos de las provincias que ya fueron a las urnas, la diferencia podría marcar un batacazo para la oposición, incluso dándole la posibilidad de aumentar su poder en la Cámara de Diputados, donde hoy cuenta con 116 legisladores nacionales. De los 257 miembros, deberán renovar sus mandatos la mitad (130). Y entre los principales distritos con peso electoral, la provincia de Buenos Aires renovará 35 bancas, la Ciudad de Buenos Aires 12, Santa Fe 10, Córdoba 9 y Mendoza 5.
En tanto, la realidad en el Senado es un poco más incierta y compleja. Allí se renovará un tercio del cuerpo, es decir, 24 de los 72 senadores. Las provincias que elegirán a sus representantes son: Buenos Aires, Santa Cruz, San Juan, Formosa, La Rioja, San Luis, Jujuy y Misiones.
Hoy, la Cámara alta se encuentra en un tire y afloje, porque ninguna fuerza política puede llegar al quórum (37) y todo parecería indicar que será una contienda muy competitiva. UxP cuenta con 31 senadores y JxC con 33, números que complican a ambos frentes debido a que el oficialismo pondrá en juego 9 bancas y la oposición deberá retener 11. Por eso, llegar a los 37 implica casi una utopía para ambos.
Destrabar las disputas políticas en el Senado será una tarea muy compleja a futuro y el escenario indica que nada cambiará, para el caso de que la elección sea reñida. La clave para el futuro será negociar minuto a minuto, porque ninguna fuerza querrá ceder poder y aunque los datos son desalentadores para el oficialismo, la última palabra la tendrá el electorado.