Se trata en efecto, de un nuevo sistema de relaciones que el gobierno de Milei comenzó a delinear tras el fracaso en el tratamiento de la ley Bases en el verano. Con el ministro de Interior, Guillermo Francos, como principal articulador con las provincias la Casa Rosada cosecha apoyos por fuera de los mandatarios de Juntos por el Cambio, quienes desde un inicio estuvieron dispuestos a apoyar.
La media sanción de Bases y del Paquete Fiscal mostró por un lado la posibilidad de articulación de la Casa Rosada de acuerdos que se vieron reflejados en apoyos legislativos, pero por otro, fisuras en el bloque del peronismo.
La más reciente “incorporación” del Gobierno fue el catamarqueño, Raúl Jalil, quien el día de la media sanción de la ley Bases posó junto al ministro de Economía, Luis “Toto· Caputo. Al apoyo de Jalil se sumó el tucumano Osvaldo Jaldo, quien salió a respaldar a su par catamarqueño y “pidió trabajar en conjunto con el Gobierno Nacional”.
Y es que al contrario de lo sucedido en enero, ahora la Casa Rosada tiene un menú de herramientas para ofrecerles a las provincias: recursos fiscales (vía aprobación del pacto fiscal); aceleración de desembolsos para obras; aspectos más aceitados de la gestión; avales para eventuales préstamo en las provincias.
Pacto de Mayo
En el Gobierno entienden que podrían contar con alrededor de 20 gobernadores (como máximo) para estampar la firma en el Pacto propuesto por el Presidente el pasado 1 de marzo..
En la mesa de aliados se sienta Gustavo Sáenz. El salteño ha oficiado de anfitrión en más de una ocasión para que Francos tenga la oportunidad de hablar con los gobernadores del norte y de esa manera, acercar posiciones.
Los misioneros con Hugo Passalacqua también mostraron acercamiento. Francos fue recibido incluso por el verdadero mandamás de la provincia, Carlos Rovira. El acuerdo alcanzado con el Frente Renovador de la Concordia va más allá de los apoyos legislativos que serán claves, sobre todo pensando en el Senado donde los números son más ajustados para el oficialismo.
En el encuentro estuvo Lule Menem, uno de los armadores de LLA. Según trasciende, el acuerdo incluye una suerte de “pacto de no agresión” en términos políticos y electorales pensando en el 2025.
Las adhesiones para trabajar de manera conjunta con Casa Rosada también llegan desde el sur. El patagónico Rolando Figueroa, del MPN se suma al bloque de gobernadores aliados. Tiene poco peso en Senado, en donde los legisladores no le responden. Sin embargo, ha sumado a Lucila Crexell recientemente a su gabinete y en Casa de Gobierno hay expectativas de que pueda sumar votos.
Otro actor importante es Santa Cruz. Su mandatario Claudio Vidal ha enviado señales varias de tensión con el Gobierno Federal. Con todo, Francos ha logrado que modere sus declaraciones altisonantes, lo ha recibido en su despacho y se espera que los votos puedan inclinar la balanza.
Los reclamos de Vidal son claros: que la empresa YPF no deje de perforar en su provincia, y que no se avance en el desguace de YCRT (Río Turbio) que tendrá un impacto negativo en la economía provincial.