El Frente de Todos está en estado de deliberación permanente. Con los números que las encuestas les están marcando, la probable derrota del 14 de noviembre provocará un nuevo terremoto interno. En ese contexto, los diferentes espacios que componen el oficialismo tienen miradas divergentes sobre el futuro del Gabinete nacional.
El presidente Alberto Fernández pretendía modificar el staff presidencial después de la elección legislativa pero, empujado por la vicepresidenta Cristina Kirchner y La Cámpora, se vio forzado a acelerar las modificaciones tras el impacto de las PASO.
Ahora, con el nuevo equipo en funcionamiento considera que no hay que realizar nuevos cambios. Lo mismo opina, según pudo saber el diario La Nación, el ministro del Interior, Wado de Pedro, uno de los funcionarios más cercanos a la expresidenta y punta de lanza de las renuncias que abrieron la crisis política tras la derrota del 12 de agosto.
El ministro político resaltó en conversaciones privadas la nueva impronta de trabajo que impuso el jefe de Gabinete, Juan Manzur, quien desde su llegada a Balcarce 50 se transformó en un nuevo polo de poder dentro del Frente de Todos como representante del peronismo tradicional que encarnan los gobernadores y la CGT.
La palabra de De Pedro es interpretada como un guiño de la vicepresidenta al nuevo gabinete, aunque nadie se atreve a afirmar que habrá continuidad para todos los ministros, porque el desenlace final de los comicios serán determinantes.
En tanto que Manzur, plantea matices. Si bien el gobernador de Tucumán en uso de licencia se mantiene prescindente de la discusión de fondo, ya avisó que en ciertos momentos un recambio de figuras es útil para “cambiar de aire” y renovar la gestión.
En el Salón Eva Perón de Casa Rosada mantuve, desde muy temprano, un encuentro de trabajo con ministros y ministras en el que evaluamos los últimos avances de las políticas públicas implementadas por cada una de las carteras en todo el territorio nacional. pic.twitter.com/fNI5Aiw7eO
— Juan Manzur (@JuanManzurOK) November 3, 2021
Por su lado, Sergio Massa, es el único que plantea en conversaciones privadas sobre la necesidad de avanzar con modificaciones. Algunos incluso proponen al presidente de la Cámara de Diputados como una opción para hacerse cargo de toda la botonera económica, lo que incluye a los ministerios de Economía y Desarrollo Productivo.
Todo indica que si el oficialismo recorta la ventaja que la sacó Juntos por el Cambio en las PASO no habrá cambios en el equipo presidencial y eso servirá de base para el relanzamiento de la gestión. “Si eso sucede será porque escuchamos el reclamo de la sociedad”, describió a La Nación un hombre con despacho en la Casa de Gobierno.
Las dudas se acrecientan ante un resultado más abultado. Si la derrota contra la oposición fuera más amplia nadie se anima a prever lo que podría ocurrir con la coalición gobernante. Todos miran hacía el Senado, desde donde hace semanas no emiten señales.
El último cambio de gabinete se produjo seis días después del terremoto electoral. Tras la carta de la vicepresidenta y las renuncias de todos los funcionarios que le responden, el Presidente cedió y avanzó con siete modificaciones. Además de Manzur ingresaron al gobierno nacional Domínguez, Aníbal Fernández (Seguridad), Daniel Filmus (Ciencia) y Jaime Perzyck (Educación). Además, Cafiero pasó de la Jefatura de Gabinete al Palacio San Martín.