Con el objetivo de fortalecer el trabajo que las instituciones llevan adelante en materia de hábitat y derecho a la vivienda en la Ciudad de Buenos Aires se conformó esta semana una mesa interinstitucional. Del encuentro para lanzar este espacio participaron el Co-Director de ACIJ, Pablo Vitale, la Defensora General de la Ciudad, Marcela Millán y la Directora del equipo de Tierra, Vivienda y Justicia Económica del CELS, Luna Miguens.
Durante el encuentro, que se realizó en la sede del Ministerio Público de la Defensa (MPD), analizaron la coyuntura habitacional y su impacto en la población, en particular en los sectores más empobrecidos, y evaluaron la necesidad de trabajar juntos en una agenda común.
De este modo, se definieron ejes de trabajos que incluyen: la construcción de un diagnóstico común sobre la problemática habitacional en la Ciudad, a partir del análisis de las políticas públicas y sus impactos; la integración socio urbana de barrios populares, en un contexto de crisis de financiamiento, parálisis de obras, deterioro socio económico de sus habitantes y problemas transversales a los distintos barrios como riesgo eléctrico, desalojos y vivienda de relocalización. También lo que ocurre con las miles de personas en situación de calle, con la intención de potenciar el trabajo que realizan organizaciones sociales y espacios institucionales. Así se busca reforzar los abordajes habitacionales a la problemática, el acceso a la justicia y el fortalecimiento de los mecanismos de denuncia y protección de situaciones de violencia institucional.
Además, los representantes del CELS, ACIJ y el MPD destacaron la importancia de trabajar sobre el mercado inmobiliario y el derecho a la vivienda, en distintos conflictos habitacionales que se profundizaron a raíz del impacto de la derogación de las regulaciones sobre los alquileres, las eventuales modificaciones del Código Urbanístico y el aumento de la presencia de las economías de plataforma en este rubro, sumado a los alquileres informales concentrados, en su mayoría, en los barrios populares.
Las instituciones coincidieron en que el problema de la vivienda se debe abordar de manera transversal y destacaron la conformación de este espacio como un entendimiento necesario para proyectar propuestas que tengan impacto directo en la comunidad.