En un golpe de timón buscando optimizar el funcionamiento del gobierno bonaerense, la mandataria de la Provincia de Buenos Aires, María Eugenia Vidal, realizará algunos enroques en los cargos jerárquicos de su equipo.
En este contexto, el actual ministro de Gobierno bonaerense, Federico Salvai, pasará a ser jefe de Gabinete de Ministros a partir del próximo año. La gobernadora volverá a crear esta figura y depositará toda su confianza -como lo hizo en los últimos años- en el marido de la actual ministra de Desarrollo Social de la Nación, Carolina Stanley.
Frente a la salida del ministro de Infraestructura bonaerense, Edgardo Cenzón, quien dejará su cargo en diciembre, otro pesado del gabinete como Roberto Gigante (actual ministro de Coordinación y Control de Gestión) se pondrá al frente de esa cartera. Mientras el tercer hombre fuerte que queda (tras la salida de Cenzón), Cristian Ritondo se mantendrá en Seguridad.
Es necesario destacar que la figura del Jefe de Gabinete en la Provincia, hasta ahora, es sólo de carácter nominal, ya que el cargo no está contemplado en la Constitución, a diferencia de Nación cuyas funciones están claramente delimitadas.
En tanto, Coordinación, creada por Vidal al asumir y asumida por Gigante, se disolverá formalmente. Pero sus funciones quedarán bajo la órbita de la nueva Jefatura de Gabinete de Ministros. Hasta el momento, Salvai se encarga de las negociaciones políticas con los intendentes, los legisladores bonaerenses y los referentes de la oposición, con esta decisión obtendrá mayor poder.
Cuando Salvai asuma sus nuevas funciones, será reemplazado en el Ministerio de Gobierno por Joaquín De la Torre, el exintendente peronista (y exmassista) de San Miguel, que hace dos meses se puso al frente del Ministerio de la Producción. Esta cartera aún no tiene reemplazante definido. Los cambios serán anunciados oficialmente en las próximas horas.
