Con una vigilia que tiene lugar desde anoche en las inmediaciones de la Catedral Metropolitana, a propósito de la asunción del Papa Francisco, el sumo pontífice sorprendió previo a la misa a los fieles cuando se comunicó- a las 3.30- vía telefónica desde Roma. El mensaje fue: “Gracias por haberse reunido a rezar y por las oraciones. Es lindo rezar porque es mirar al cielo y saber que tenemos un Padre bueno que es Dios”.
Además, expresó: “Cuidémonos los unos a los otros. Cuídense entre ustedes, no se hagan daño. Cuídense la vida, cuiden la familia, cuiden la naturaleza, a los niños, a los viejos”.
Francisco clamó para que “no haya odio ni peleas ni envidias” y lo ejemplificó con una frase típica de los argentinos: “No le saquen el cuero a nadie”. Por el contrario, dijo, “dialoguen, que este deseo de cuidarse crezca en el corazón. Y acérquense a Dios”.
Por último y en concordancia con el rol que asume afirmó: “Dios es bueno, perdona y comprende siempre; no le tengan miedo. Acérquense a él. Y que la virgen que siempre los cuida, los bendiga mucho”.
Mientras tanto, en el Vaticano continúa la misa ante más de un millón de personas. En la primera fila, se encuentran entre otras personalidades, la presidenta Cristina Fernández de Kirchner, y la futura reina de Holanda, Máxima Zorreguieta.
LA HOMILÍA DE FRANCISCO:
En su discurso inicial, el Papa pidió “respeto por cada criatura de Dios, especialmente a los niños, a los ancianos, a los que son más frágiles y muchas veces están en la periferia de nuestro corazón”.
“Cuando no cuidamos la creación, entonces aparece la destrucción y el corazón languidece”, dijo para luego pedir: “Seamos custodios de la creación, del diseño de Dios inscripto en la naturaleza, custodios del otro, custodios del ambiente”.
Asimismo, expresó que “el odio, la envidia y la soberbia ensucian la vida”, y señaló que “no debemos tener miedo de la bondad, ni siquiera de la ternura”.
Y sostuvo: “El cuidar, custodiar requiere bondad, requiere vivir con ternura”.
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