La mayoría de los precandidatos presidenciales, tanto del oficialismo como de la oposición, tienen previsto mirar la final del Mundial de Brasil de este domingo entre Argentina y Alemania en la intimidad, junto a sus respectivas familias, muchos de ellos en el interior del país.
De acuerdo con una ronda de consultas realizada por la agencia DyN, con las excepciones del precandidato de UNEN Fernando “Pino” Solanas que se encuentra de viaje en el exterior y del referente del PRO, Mauricio Macri, quien seguirá el partido desde la pantalla gigante que el gobierno porteño instaló en la Plaza San Martín, el resto de los dirigentes seguirá las alternativas del encuentro por la Copa del Mundo en la intimidad, con amigos y familiares.
El gobernador bonaerense y precandidato del oficialista FpV, Daniel Scioli, seguirá el encuentro -como hizo en casi todos los partidos de la Selección en este mundial- en su casa de Villa La Ñata, Tigre, junto a sus esposa, hija y nieta.
El gobernador de Entre Ríos, Sergio Urribarri, verá la final en su domicilio particular de la ciudad de Concordia; el ministro del Interior y Transporte, Florencio Randazzo hará lo propio en familia en su casa de La Plata; el presidente de la Cámara de Diputados, Julián Domínguez, lo hará con su familia en la localidad bonaerense de Chacabuco.
En cambio, el ministro de Defensa y precandidato kirchnerista, Agustín Rossi, será el único del oficialismo que mirará el partido desde una repartición oficial: la Quinta que tiene el ministerio en Campo de Mayo, aunque será en la intimidad con amigos y familiares.
En la oposición, el diputado nacional y titular del Frente Renovador, Sergio Massa podría ver el partido desde el “Maracaná”, ya que estuvo en Brasil en la semifinal contra Holanda.
En tanto, los precandidatos del Frente Amplio UNEN, a excepción de Solanas, también privilegiaron disfrutar en familia y con amigos, la última instancia de la competición futbolística.
El diputado radical y ex vicepresidente, Julio Cobos, seguirá el domingo el partido de la Selección en su casa de Mendoza capital; el senador radical, Ernesto Sanz, hará lo propio junto a su familia en San Rafael, Mendoza y el socialista, Hermes Binner, seguirá la instancia final del Mundial con su familia, en Rosario, Santa Fe.
Desde el gobierno nacional no había previsto hasta el momento ningún festejo en conjunto en caso de que Argentina gane este domingo y consiga alzarse con el campeonato mundial después de 24 años, dado que la presidenta Cristina Fernández continuaba con parte de enferma por una faringolaringitis.
Sin embargo, desde el oficialismo no descartaban organizar los festejos para el día siguiente, el lunes, cuando arriben al país los jugadores de la Selección nacional con un resultado ya definido.