Las estrategias de los automovilistas para eludir las multas de tránsito son numerosas, variadas y se convirtieron en algo habitual que puede observarse en las calles con sólo detenerse unos minutos a mirar los vehículos que circulan por las principales arterias de la Ciudad.
Chapas “prolijamente” embarradas, franelas o cartones colocados sobre las matrículas de autos mal estacionados para ocultar el dominio, CD’s empleados como herramienta para ocultar el dominio mediante el reflejo de la luz del flash que se utiliza para las fotomultas, son sólo algunas de las estrategias que implementan los infractores para no ser registrados por los agentes de tránsito.
Antes esa realidad, el legislador PRO, Roberto Quattromano, presentó un proyecto que busca elevar la sanción a quien obstruya la visibilidad del dominio de su automóvil.
“Hay multas que se hacen por distracciones y el conductor no tiene malas intenciones. Pero esto premeditado, la persona que sale a la calle con la patente tapada es alguien que sabe que va a violar la ley y no quiere que lo reconozcan”, afirmó el hombre del macrismo.
El proyecto propone multar con aproximadamente 1000 unidades fijas ($6.400 pesos) a quien dificulte la visualización de la chapa patente. Actualmente, la Ley 451 prevé una sanción de casi 4 mil pesos (300 unidades fijas)
“Ocultar la patente, adulterarla o reemplazarla es una práctica habitual para evitar una sanción. En especial la dificultad de identificar la placa trasera. Se puede realizar tapando o alterando alguna letra o algún número, envolver la placa con trapos o bolsas, adherir calcomanías, doblar la chapa, fijar un CD o espejo para que el flash de la fotomulta se refleje en él, entre otros ejemplos”, señala la iniciativa.